El agua oxigenada es un producto barato y muy popular en los botiquines de muchas viviendas. Este desinfectante compuesto por peróxido de hidrógeno (H202) es una fórmula similar al agua, pero con unas propiedades muy diferentes a ésta. Pero no solo se usa como un producto sanitario, también tiene otras múltiples aplicaciones en el sector aeroespacial, industrial, artístico, etc.
Ahora descubrirás que tienes un producto muy flexible en casa, capaz de blanquear, de servir como antiséptico, desinfectante, para tratamientos de belleza, y un largo etc. Eso sí, siempre hay que usarlo respetando unas normas de seguridad y de forma adecuada, ya que puede llegar a ser tóxico o causar problemas si no se maneja con cuidado.
4Para los hongos

Los hongos son un problema que tienen muchas personas, y quizás no sepan que el agua oxigenada puede ayudarles.
Se puede usar como tratamiento o coadyuvante para combatir los hongos, especialmente los de los pies.
Para ello, puedes disolver agua oxigenada en agua al 50/50 y poner en remojo tus pies y uñas con esta solución. Déjalos varios minutos y luego sécalos muy bien.
El agua oxigenada, como le ocurre al bicarbonato sódico, puede ser también un buen aliado para combatir los malos olores, especialmente en verano. Una época donde estos problemas crecen al sudar el pie y generar las condiciones idóneas para que estos hongos proliferen.