Para todos los trabajadores el momento de la jubilación es percibido como el paso a una vida mucho más tranquila y libre de las preocupaciones asociadas al trabajo. Sin embargo, el sistema de pensiones español no es especialmente generoso con los autónomos, por lo que para este colectivo el dejar la vida laboral suele implicar una pérdida de recursos económicos.
Además, puede ocurrir que por una circunstancias u otras no se haya lo cotizado lo suficiente como para obtener una prestación contributiva. Pero esto no debe ser motivo de preocupación, nuestro sistema dispone también de pensiones no contributivas para autónomos. Por eso, en esta ocasión vamos a conocerlas con más detenimiento.
5Tipos de prestaciones no contributivas que pueden percibir los autónomos
Pensión de jubilación. En este caso es necesario haber alcanzado la edad legal de jubilación (no hay pensión no contributiva para la jubilación anticipada), ser residente en España y haber residido al menos 10 años en España u otro país de la Unión Europea.
Pensión de invalidez. El solicitante debe tener entre 18 y 65 años y no cumplir los requisitos para tener derecho a una prestación contributiva. Residir en España o en la Unión Europea y haberlo hecho durante al menos 5 años, 2 de ellos justo antes de solicitar la prestación. La discapacidad o enfermedad crónica debe tener un grado igual o superior al 65%.
Prestación por maternidad. La novedad con la nueva legislación sobre autónomos es que las que perciben la prestación ya no tienen que cotizar a la Seguridad Social mientras la están cobrando, puesto que la cuota está bonificada durante el tiempo de baja por maternidad.