La pandemia no distingue entre ricos y pobres. Y Carlos Slim no es una excepción. El accionista mayoritario de FCC (es propietario del 61% de las acciones y de la deuda de Esther Koplowitz, que suma otro 20% de las acciones) ha visto como la acción se ha ido desinflando desde que FCC presentara resultados. Situación que se ha ido agravando con la crisis provocada por el coronavirus.
Los títulos de FCC arrancaron el año a 10,98 euros. Fue el 21 de febrero, una semana antes de la presentación de resultados, cuando alcanzaron su pico: 11,88 euros. A partir de ahí comenzó una caída que, ni siquiera los buenos resultados (ingresos superiores a los 6.000 millones y beneficios de casi 370 millones), lograron enderezar.
En estas llegó el coronavirus, y la tendencia negativa continuó: cerró el día de ayer a 7,50 euros. Por tanto, y desde los máximos de febrero, la acción ha caído un 58,4%.
La caída de la acción, incluso antes de la llegada de la pandemia, le está haciendo un roto a Carlos Slim
Un descenso de la acción que se ha traducido en menos dinero para Carlos Slim. Si a finales de 2019, la capitalización de FCC era de 4.283 millones de euros, en la actualidad es de 2.941 millones de euros. Como Slim tiene el 81% de las acciones, sus títulos han pasado de valer 3.469 millones de euros, a 2.383 millones. Por tanto, y en lo que va de año, se ha dejado en el camino 1.086 millones de euros.
LA ACCIÓN DE FCC
Fue el 15 de diciembre de 2014 cuando Carlos Slim aterrizó en FCC para salvar a la constructora de la quiebra. Por aquel entonces, su deuda financiera era de casi 5.000 millones de euros.
En esa primera toma de contacto, Carlos Slim pagó por la acción 9,75 euros. En total, 650 millones de euros por el 25,6% del total de los títulos. En enero de 2016, y por un paquete de acciones del 1,1%, pagó un precio unitario de 6,6 a 6,9 euros. En marzo de ese mismo año, lanzó una OPA por el 100% a 7,6 euros. La inversión de 738 millones de euros. Y en una segunda ampliación de capital, a 6 euros, desembolsó 241,7 millones de euros.
En números redondos, se puede decir que el propietario de las compañías mexicanas Carso, Inbursa o Telmex compró FCC a una media de 8,4 euros la acción. Y el desembolso superó los 1.800 millones. Luego están otras participaciones y la deuda de Esther Koplowitz.
Hasta ahora, y tacita a tacita, Carlos Slim había ido sumando plusvalías. Incluso por encima de esos 1.000 millones. Hay que recordar que la acción, en su peor época con Carlos Slim ya subida al barco, llegó a estar a 5,4 euros. Fue un año después de su llegada, en diciembre de 2015.