El coronavirus ha cambiado la forma de los españoles. Los madrileños, como muchos otros, se han despertado este sábado conscientes de que no podrán tomar el vermú ni comer en ningún bar o restaurante, después de que Isabel Díaz Ayuso anunciara el cierre de estos comercios. Sí seguirán abiertas tiendas de alimentación y farmacias, más otras excepciones. Los supermercados siguen repletos de gente que arrasa con productos básicos como el papel, que han disparado sus precios. Sin embargo, no todo ha subido. La crisis del Covid-19 ha conseguido bajar el precio en las gasolineras.
1GASOLINERAS DESIERTAS
El tránsito por las gasolineras ha bajado de forma considerable. Más que por el hipotético contagio en este establecimiento, por el mero hecho de que la gente ya no sale de casa. Sólo hay que vislumbrar los datos de contaminación de China, que han bajado de forma mayúscula desde la expansión de esta pandemia mundial, denominada así por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En España, ya sucede algo similar.