Se sabe que esta es una de las peores pesadillas de los conductores, y le puede pasar a cualquiera que no esté demasiado atento a lo que está haciendo. Aunque claro, en los coches más modernos hay ciertos factores que podrían impedir que se cometiera el error de echar diésel en un coche a gasolina, pero no al contrario.
Los problemas que puede suponer para el motor de un coche confundir estos dos combustibles no son nada agradables, y mucho menos baratos. Por ello, antes de que te suceda, es mejor que conozcas las posibles consecuencias, de este modo, prestarás mucha más atención. En el caso de que te ocurra, al menos sabrás qué hacer.
2Gasolina en un coche diésel
Lo bueno de las mecánicas diésel, es que estas con mucho más duras, en lo que se refiere a términos catastróficos. Puede que sea por ello que por el diámetro de las mangueras, se pueda verter gasolina donde no se debe.
De nuevo, si tan solo has echado un poco de gasolina en tu coche diésel, lo mejor es parar inmediatamente, cuelga la manguera y avisa a los responsables de la estación de servicio. De esta forma dejaréis apartado el coche donde no moleste, y podrás llamar a tu seguro para que la grúa lleve tu coche al taller. Pero si sucede el error de que no te has dado cuenta de la equivocación, y llegas a subir al coche, al arrancar, lo hará mal, hasta que la proporción de gasolina que el diésel intente quemar sea muy alta, y se pare.
Lo que viene después de esta pesadilla, es una visita al taller, donde se vaciará lo que quede de gasolina, y cambiarán el filtro de gasoil. Y si tienes una excesiva suerte, la bomba de gasoil no se habrá visto dañada, aunque lo más probable es que la tengas que cambiar, en este caso, tu bolsillo empezará a temblar.