La multinacional catalana de moda Mango volvió a números negros al cierre del ejercicio 2019 con un beneficio neto de 21 millones de euros frente a las pérdidas de 35 millones que cosechó en 2018, a la vez que batió récord de facturación con 2.374 millones, un 6,3% más respecto a los 2.233 millones ingresados un año antes.
En declaraciones a Europa Press, el consejero delegado de Mango, Toni Ruiz, ha destacado que el ejercicio pasado fue «extraordinariamente satisfactorio», y preguntado por las previsiones para este 2020 ha explicado que la firma trabaja con el objetivo de superar nuevamente récord en ventas.
«Nos gustaría un incremento similar al del año pasado, pero las circunstancias actuales nos impiden realizar una previsión. En online, sí que hemos marcado un objetivo de crecimiento de ventas del 20% sobre la cifra que cerramos el año pasado», ha afirmado.
En 2019, Mango superó en 47 millones las ventas obtenidas en 2015, cuando se registró el mejor dato histórico de facturación de la compañía, un aumento que ha ido acompañado de un Ebitda de 194 millones, un 43,7% más, y de un resultado bruto de 41 millones.
En cuanto al endeudamiento bancario, la deuda financiera neta se ha recortado de 415 a 184 millones de euros en dos años: «Nuestra situación financiera es la mejor que hemos tenido en muchos años. Hoy somos capaces de devolver toda nuestra deuda con lo que genera la compañía en un año. Nuestro objetivo es seguir reduciéndola, pero sin renunciar a proyectos que incrementen nuestra rentabilidad».
España se mantiene como el primer mercado en ventas de Mango, al concentrar el 23%, mientras que el 77% restante corresponde a mercados exteriores, y por líneas de negocio, Man, Kids y Violeta representaron el 18% de las ventas, destacando la colección de hombre, que creció por encima del 20% y superó los 200 millones de facturación.
LA VENTA ONLINE CRECE UN 26,7%
Por canales, la venta online creció un 26,7%, alcanzando los 564 millones de euros y representando el 23,7% del total de la facturación de Mango, que trabaja para conseguir en los próximos ejercicios crecimientos superiores al 20%.
Para apoyar este crecimiento, la firma propiedad de Isak Andic se apoya en los diez almacenes logísticos que tiene repartidos por el mundo y en la ampliación del centro logístico de Lliçà d’Amunt (Barcelona).
Actualmente, este centro, que es uno de los más grandes de Europa, tiene una superficie de 180.000 metros cuadrados, si bien se prevé ampliarlo en 90.000 metros cuadrados y que alcance los 270.000 en 2023, una ampliación que supondrá una inversión de 35 millones de euros.
La web de Mango, compañía fundada en 1984 y con una plantilla global de 15.000 empleados, registró el año pasado más de 600 millones de visitas, y cerca de un 80% se realizó a través de dispositivos móviles.
De su lado, las ventas en las tiendas físicas crecieron un 5,5% en términos comparables, y el parque de establecimientos se situó al cierre del ejercicio en 2.188, cinco más que en 2018, alcanzando una superficie de venta de 803.000 metros cuadrados, un 1% menos, repartidos por 110 países.
Ruiz ha explicado que, si bien Mango acaba de abrir en Maldivas, los planes de la compañía no pasan por adentrarse en nuevos países, sino que quiere consolidarse donde ya está presente.
«En 2020 seguiremos mejorando nuestro parque de tiendas, pero nuestro foco no está tan puesto en aumentar la superficie comercial sino en ir sustituyendo tiendas pequeñas por tiendas de mayor tamaño, así como en ir actualizando tiendas cuyo interiorismo haya quedado desfasado», ha aclarado.
CORONAVIRUS
Preguntado sobre las afectaciones en la actividad de Mango derivadas del brote internacional de coronavirus, Ruiz ha asegurado que la multinacional «no tiene ningún problema de abastecimiento en estos momentos.
«Si bien es cierto que inicialmente la producción en China estaba muy afectada, hoy está ya a niveles superiores al 80%. Debido a ese parón inicial de la producción en China, Mango ha decidido volar algunos modelos de la colección que podrían haber sufrido retrasos», ha apuntado, si bien ha precisado que el impacto económico es menor y que en ningún caso se repercutirá a los clientes.
Ha añadido que algunas producciones se han trasladado a otros países con los que Mango ya trabaja habitualmente, tanto en lejanía, como con India por ejemplo, como en cercanía, como es el caso de Marruecos: «Por todo ello queremos dejar claro que Mango no tiene ningún problema de abastecimiento y que las colecciones estarán a tiempo en nuestras tiendas».
En cuanto a la plantilla, la multinacional está siguiendo los protocolos que establecen las administraciones de los diferentes países en los que hay afectación por covid-19: «La prioridad está siempre enfocada en asegurar la salud de nuestros clientes y de todos nuestros trabajadores.