El primogénito de Doña Elena, Froilán, no ha sido precisamente el ejemplo de mejor comportamiento de La Casa Real. Parece que se estaba reformando, o comportando mejor, pero lo cierto que no es así.
Tras un tiempo de inactividad en lo que podría ser el mal comportamiento que le podría caracterizar, llevaba ya un tiempo sin que se conocieran noticias suyas de este tipo. Pero eso no quiere decir que haya cambiado.
De hecho, creemos que aún puede ir a más y que los jaleos se repitan con más frecuencia, aunque habrá que ver cuál es la última con que nos sorprende. Este año no está siendo tranquilo para la familia real, especialmente en lo que a Froilán se refiere.
Actualmente, los vicios de Froilán están cansando mucho a la Casa Real, y es que no dejan en muy buen lugar a la familia. ¿Quieres saber lo que está haciendo Froilán que está acabando con la paciencia de la familia y dañando su imagen?
1Desde bien pequeño, Froilán apuntaba maneras
Ya empezó desde pequeño dando patadas a sus primos en la boda de los reyes. Ese fue uno de sus primeros gestos públicos. Después le siguieron escándalos en noches de fiestas en discotecas de la capital, peinetas a los periodistas y muchas otras polémicas.
Hacía tiempo que no teníamos noticias malas al respecto, y parecía que estaba reformando. Precisamente cuando empezó a salir con Mar Torres ha empezado a estar más comedido con la prensa y opinión pública. Aunque la pareja también ha despertado su propia polémica. Pero no. La realidad es bien distinta.
Froilán acude a todas las fiestas de renombre. No hay un evento que se pierda. Le gusta pasárselo en grande. Froilán frecuenta una discoteca reservando la zona VIP. Ha llegado a beber más de la cuenta y perder los papeles por esa causa. Hasta en el privado la lía. Aseguran que se cree mucho por ser quién es.
Nos acordamos de las imágenes en que se le pudo ver encarándose con otro joven en las puertas de la discoteca diciéndole “que no me toques” mientras no cesaban los empujones por ambas partes. Ese día aún no lo hemos borrado de nuestra memoria, y tampoco fue el único.
¿Y la vez que fue al parque de atracciones en el año 2015 y quiso saltarse la cola por ser quien es. Cuando un chico no se lo permitió le dijo “tú cállate, puto chino”. Salió ahí su carácter racista. Se pensaba que la Casa Real tenía preferencia donde quisiera, y sobre todo él con mayores derechos a entrar antes que los demás mortales.