Los perfumes se han venido usando desde la antigüedad. Todo ha evolucionado mucho desde los primeras esencias y aceites aromáticos hasta los actuales perfumes de grandes marcas. Entre las firmas que comercializan perfumes hay algunos prohibitivos para la mayoría de personas, y eso es debido a los precios tan elevados que tienen. Por eso se han transformado en piezas de deseo para muchas personas.
Sofisticadas fragancias y elegantes frascos que intentan llamar la atención, al igual que lo hacen sus anuncios. Todo para ofrecerte algunos de los aromas que más vale oler del planeta. Además, atendiendo a la capacidad de los frascos que ofrecen, tampoco hace justicia a los precios por los que lo ofrecen. Aunque siempre se ha dicho que los buenos perfumes siempre vienen en botes pequeños…
Ciertas firmas hacen también versiones limitadas o simplemente lanzan una única unidad de su producto. Eso les vale para aumentar aún más el precio de salida del producto. Y los hace objetos de deseo para muchos coleccionistas que ni siquiera lo van a usar, simplemente lo tienen guardado como un tesoro para tener la única o una de las pocas unidades que se lanzaron en su poder.
El lujo y la excentricidad son uno de los mercados más fructíferos. No pienses que por los precios desorbitados nadie los va a comprar. Todo lo contrario, son bastante codiciados y se venden muy bien entre los ricos que se pueden permitir este tipo de capricho…
Aunque la mayoría de los mortales huyen de este tipo de precios abusivos y se contentan con darse un capricho de vez en cuanto y comparar perfumes de reconocidas firmas que cuestan menos de 100€. Y muchos otros van directos a algunas copias más baratas o simplemente usan la colonia más barata, algunas de ellas huelen tan bien como los perfumes más caros, pero la diferencia es que no tienen detrás una gran marca o un diseñador reconocido.
3Perfumes para millonarios
No hay muchos perfumes que se le acerquen en precio al anterior, que ha llegado a cifras históricas. Pero sí que hay algunos cuyos precios te dejan sin aliento. Comprarlos te va a suponer un gran desembolso, como es el caso de estos otros.
Dignified Privée es otro perfume de House of Sillage que cuesta mucho dinero. Concretamente tendrás que pagar 500.000€ por un frasco de esta fragancia. No está limitado a una única unidad como el de DKNY, pero sí que lo deberás pedir por encargo, ya que no lo producen en masa. Es una fragancia masculina creada por Nicole Mather, con un frasco hecho de oro blanco, ónix cortado a mano, platino y diamantes. Todo creado de forma artesanal.
Tampoco se queda atrás Clive Christian Nº1 de Imperial Majesty. Se fabricaron solo 10 unidades en todo el mundo, lo que lo hace aún más codiciado. Su precio asciende a los 205.000€. 7 de los frascos están hechos a mano para coleccionistas y 3 de ellos se exhiben en Harrods, Bergdorft Goodman y otra que la lleva siempre esta firma a donde va por el mundo para mostrarla. Así que ni siquiera las 10 pueden ser compradas en su totalidad.
Después de estos nombres, llega otro con nombre español. Se trata de Ópera Prima de Bvlgari. Su valor es de 203.000€ por la unidad, la única unidad que se ha fabricado. Fue el perfume más caro del mundo en su momento (2014, EN EL 103º aniversario de la firma), puesto que ahora tiene el de DKNY. No fue fácil encontrar comprador, pero finalmente lo encontró.
Chanel Nº5 Parfum es un conocido entre los perfumes. Pero este es especial, solo se fabricaron 55 unidades de este modelo valorado en 28.000€ por unidad. La edición limitada fue una de las más exitosas, aunque no lo creas. El frasco está fabricado en cristal de Baccarat con un diseño de 1921. Además, está firmado por la prestigiosa marca creada por Coco Chanel.
Otra de las ediciones limitadas de perfumes es el de Sacrées de Thebes, llamado Baccarat Les Larmes. El precio es de 5100€ que parece que contenga las lágrimas sagradas de Tebas (como se traduce el nombre en español), pero no. Contiene esencia de jazmín, geranio, ylan ylang, cardamomo, ámbar y almizcle. Es decir, que te estás vertiendo por encima lo que parece una receta algo cara… Eso sí, todo guardado en un frasco de cristal púrpura.