Nuestro teléfono móvil, ya sea un terminal Android o un dispositivo con iOS, se ha convertido en un elemento imprescindible para nuestro día a día. Atrás han quedado esos tiempos en los que utilizabas el teléfono para llamar. Ahora es la herramienta menos usada. Sí, es más probable que uses tu iPhone para hacer fotos, navegar por Internet o usar redes sociales que para hacer una llamada.
El problema es que, si antes perdías o te robaban el teléfono, pues como mucho te cabreabas por el valor del terminal en sí, además del coñazo de tener que renovar la tarjeta SIM. Vale, y si no tenías los números guardados en una libreta, tus contactos estaban perdidos para siempre. Pero, si le pasa algo a tu terminal Android o a tu iPhone, el problema es mucho más grave
3Siempre que pierdas o te roben el móvil, denuncia
Posiblemente pienses que no vale la pena denunciar, que tu teléfono no va a aparecer jamás. Pues que sepas que eso es completamente falso. Cuando tu realizas una denuncia, tienes que llevar el IMEI de tu teléfono Android o iPhone. Hablamos de un número de serie único para cada dispositivo. Y sí, es cierto que si alguna persona normal se lo ha encontrado por la calle, es bastante difícil que le pare la policía para ver si el terminal es robado.
En cambio, si el amigo de lo ajeno que se ha encargado de robarte el móvil es un habitual para los policías, lo más probable es que sí verifiquen que el IMEI del dispositivo no figura como robado.
Te sorprendería saber la cantidad de móviles que se recuperan de esta manera. Así que, da igual que tengas un Android muy antiguo o el último modelo de iPhone. Si te han robado el teléfono, ve lo antes posible a poner la correspondiente denuncia ante la policía.