Orange España ha elegido a Iberdrola como proveedor de energía verde para los 9.000 puntos de suministro de su red. De esta forma la operadora de telecomunicaciones firma con la eléctrica una alianza a largo plazo que cristaliza en un acuerdo de compraventa de energía (un contrato PPA en sus siglas en inglés) por un período de 12 años. La iniciativa permite a Orange mantener su compromiso con el consumo de energías sin emisiones en el país, y a un precio competitivo, estable y predecible, bajo la fórmula Power Purchase Agreement.
La mitad del consumo del contrato firmado -200 GWh/año- está asociado a un activo renovable de nueva construcción, el proyecto fotovoltaico Ceclavín, con una potencia instalada de 328 MW, situado en la provincia de Cáceres, y supone el tercer proyecto fotovoltaico que Iberdrola pone en marcha en Extremadura. Su construcción representará, además, una inversión de unos 250 millones de euros.
Estos contratos de compra venta de energía a largo plazo (PPA) aportan estabilidad a las inversiones de la compañía y se han convertido, asimismo, en una herramienta óptima para la gestión del suministro eléctrico de grandes consumidores, comprometidos con un consumo limpio y sostenible«, explica Ángeles Santamaría, CEO de Iberdrola España. Además, «estos acuerdos demuestran la competitividad de las renovables y su capacidad para suministrar energía a precios asequibles y estables”, concluye la directiva de la eléctrica.
Ceclavín, que evitará la emisión a la atmósfera de 110.000 toneladas de CO2 al año, forma parte de la estrategia de inversión en proyectos de generación de energía renovable de Iberdrola en España, donde prevé la instalación de 3.000 MW hasta 2022.
Esta estrategia desplegará la decidida apuesta por los contratos bilaterales de la eléctrica, como vía para promover el suministro de energía a precios competitivos y estables entre grandes clientes, comprometidos con un consumo sostenible. “A través de los PPAs, se abren muchas oportunidades para el desarrollo de los proyectos renovables que están transformando el presente y el futuro energético en nuestro país», apunta Santamaría .
Del lado otro lado, el acuerdo con Iberdrola refuerza la línea comprometida de Orange por el cuidado del planeta y por la sostenibilidad que se contemplan en el plan estratégico del Grupo -Engage 2025-, del que España, como segundo mercado, es parte fundamental. «Además, refuerza nuestra estrategia como Grupo para alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono en 2040, contribuyendo igualmente a aumentar la capacidad de energía renovable en España“, afirma Laurent Paillassot, CEO de Orange España.
PPAS FIRMADOS EN EL TODO EL MUNDO
Al cierre del tercer trimestre del año pasado, Iberdrola contabilizaba PPAs de renovables firmados por 1.500 MW en todo el mundo. Iberdrola acumula contratos con grandes compañías de Estados Unidos, España y México para la venta de electricidad a largo plazo procedente de sus instalaciones eólicas y solares.
Iberdrola es un referente en el ámbito de los PPAs en el mundo y a lo largo de estos últimos años la energética ha impulsado estos contratos, sellando acuerdos con multinacionales como Amazon, Apple, Google, Nike, Facebook o el Grupo Modelo, en América, o con Euskaltel o Kutxabank, en España.
OBJETIVOS RENOVABLES DE IBERDROLA EN ESPAÑA
El proyecto fotovoltaico Ceclavín se enmarca en la apuesta de la compañía por reforzar la inversión en generación de energía limpia en España, con la instalación de 3.000 nuevos MW renovables hasta 2022. Hasta 2030, las previsiones de la compañía apuntan a la instalación de 10.000 nuevos MW, lo que permitirá la creación de empleo para 20.000 personas.
En España, Iberdrola el primer promotor eólico -con una potencia instalada de más de 5.800 MW- y líder en energía renovables, con más de 16.000 MW instalados; un volumen que en el mundo se eleva a más de 30.300 MW y convierte a su parque de generación en uno de los más limpios del sector energético.
La apuesta de Iberdrola por un modelo económico descarbonizado le ha llevado a comprometer inversiones de 10.000 millones de euros cada año en el mundo, después de haber destinado casi 100.000 millones a estos ámbitos desde 2001. De estos, 25.000 millones se han invertido en España.