Hasta 2010, Eroski era el tercer operador de España con cuotas de mercado que llegaron al 8,1%. Sin embrago, en cuestión de una década la cooperativa vasca ha caído en picado hasta la quinta posición (4,9%) y no deja de ceder terreno hasta en su propio feudo, el País Vasco. Pero, ¿qué le ha pasado a Eroski?
“En 2010 tenía presencia en toda España, pero ahora menos. Mercadona le resta parte del mercado en País Vasco”, explica Florencio García, Retail & Catman sector director en Kantar. De hecho, el crecimiento de la cadena de Juan Roig (0,6 puntos para liderar con una cuota del 25,5%) se lo debe en parte a su incipiente llegada a Euskadi y potencial de crecimiento. A cierre de 2019, la compañía valenciana cuenta ya con 19 supermercados en la región, según datos aportados por Mercadona.
Durante esta década, la obsesión de Eroski no ha sido otra que reducir su deuda; algo que ha conseguido, pero a costa de perder notoriedad, ceder terreno y perder cuota de mercado. Así que durante unos años se dedicó a vender su cartera de tiendas. En 2014, traspasó 140 supermercados en toda España a DIA. En 2016, vendió un paquete de hasta 35 hipermercados a Carrefour por un importe máximo de 205 millones de euros. Un año después, la socimi Lar cerró la compra de 22 supermercados por 48 millones de euros. Estos activos habían sido previamente vendidos por el grupo de distribución al fondo Rockspring.
La venta de locales a DIA o Carrefour en zonas como Madrid provocó, como es lógico, que la cadena desapareciera casi por completo del resto del territorio nacional con tiendas propias. Si bien es cierto, a golpe de franquicia ha retornado a lugares como Madrid. Solo en 2016, Eroski alcanzó los 10 supermercados franquiciados en la Comunidad de Madrid. A cierre de 2018, contaba con nueve supermercados franquiciados y cuatro agencias de viaje. Cifras muy lejanas a las del medio centenar que espera BM Supermercados abrir en diez años en Madrid. Su principal rival vasco hasta le gana terreno en la capital española.
El año 2017 marca un antes y un después en Eroski. Con la venta de las 103 tiendas de perfumerías If a Douglas el grupo dio por finalizado el proceso de desinversión. La cooperativa cerró las cuentas del ejercicio 2017, a 31 de enero de 2018, con un resultado positivo de 33,2 millones de euros y redujo 167 millones de euros de deuda financiera.
A cierre del ejercicio 2018 (las cifras más actualizadas), Eroski contaba con 1.278 supermercados, 56 hipermercados y 19 cash&carry. La gran mayoría son propios.
LA OBSESIÓN DE REDUCIR DEUDA
En el ejercicio 2018, Eroski vio la luz al final del túnel. La cooperativa redujo 187 millones de euros su deuda financiera, alcanzando desde 2010 la amortización de deuda de casi 1.800 millones de euros. Justo hace una década la deuda a corto y largo plazo de Eroski rondaba los 3.750 millones de euros (ahora es de 2.000 millones, aproximadamente), según datos de Bloomberg. En esa fecha alcanzó un acuerdo con 23 entidades para la reestructuración de una deuda de 1.705 millones de euros con vencimiento final en enero de 2014.
Se trató del primero de los tres acuerdos con la banca en esta década. Este acuerdo, junto con el préstamo puente de 322 millones de euros que consiguió, dio un respiro a sus cuentas donde seguían pesando los más de 1.100 millones de euros que requirió a la banca para comprar Caprabo en 2007.
En agosto de 2014, con la soga al cuello la cooperativa vasca volvió a respirar tranquila tras alcanzar un acuerdo con las ocho principales entidades financieras que superan el 85% de la deuda bancaria para la reestructuración de su deuda por importe de 2.605 millones de euros hasta 2019. Entre los acuerdos, la banca exigió retomar el plan de desinversiones de activos no estratégicos suspendido desde 2011.
CAPRABO SUFRE EN CATALUÑA
Por otro lado, la situación de Caprabo –filial de Eroski– no es mucho mejor ya que “está sufriendo en Cataluña por la competencia de Condis y Bon Preu”, apunta el experto de Kantar. Y lo cierto es que su situación no es especialmente buena. El supermercado cerró el ejercicio 2018 (31 enero 2019) con una facturación de 912 millones de euros, un 8% menor que el ejercicio anterior. Además, registró unas pérdidas de 5 millones de euros debido, principalmente, a las elevadas inversiones que la compañía ha llevado a cabo para mejorar su red logística y de establecimientos.
De hecho, Caprabo siempre ha estado en las quinielas como opción de desinversión para Eroski, aunque el acuerdo con la banca ya no contempla la venta de activos estratégicos e incluye la reorganización societaria de las filiales mercantiles del grupo Eroski por áreas de negocio a fin de optimizar su resultado y recursos.
En dicho acuerdo, Eroski consiguió llegar a un acuerdo con la banca para refinanciar los 1.540 millones de euros de deuda (el 75% de su deuda total) hasta el 31 de julio de 2024. Actualmente la deuda total es superior a los 2.000 millones. Se trata de un acuerdo más favorable que los anteriores, aunque exige varias condiciones a Eroski que afectan a su negocio.