Cuando nos ponemos a dieta no siempre creemos que hemos acertado. Llegan ciertos momentos del día en que nos comeríamos cualquier cosa y parece que no podemos controlarnos. Es la temida ansiedad por la comida.
Lo más importante a la hora de comenzar cualquier plan es tener claro el objetivo que queremos lograr y todo lo que vamos a mejorar: salud, aspecto físico… Además, también hay que entrenar la fuerza de voluntad. Descubre los mejores consejos para decirle adiós a esa ansiedad y controlar tu mente.
3Durante la dieta debes ingerir mucha agua
Siempre que empezamos una dieta lo tenemos más que presente: hay que ingerir al menos dos litros de agua diarios. Si no lo cumples, corres el riesgo de tener más ansiedad. El agua también tiene un gran poder saciante.
Además, el agua nos ayudará a hidratarnos. Te sorprendería conocer la gran cantidad de veces en las que confundimos tener hambre con sed. Es recomendable tomar un vaso antes de cada comida para saciarnos más con el plato.