Las redes sociales se fraguaron con mucho trabajo de investigación tras de ellas. Gran parte de ese trabajo fue para lograr engañar a las personas, con estudios sobre cómo afectaba cada uno de sus elementos en generar dopamina en el cerebro. Facebook es uno de los reyes en este sentido, junto con su otra red social, Instagram. También lo han hecho otras redes sociales conocidas.
Aunque sean gratuitas, ganan ingentes cantidades de dinero con tus datos privados, esos que tú mismo subes de forma consciente cuando publicas, das a un like, e incluso cuando subes imágenes con metadatos. Por eso les interesa siempre tener a gente enganchada. Por eso, cuando se están planteando quitar los ‘likes’, es probable que ya tengan nuevos métodos para crear adicción de una forma diferente.
Es algo que preocupa a muchos expertos en salud. Cada vez hay más personas enganchadas a las nuevas tecnologías, y mucha culpa la tienen las redes sociales, especialmente entre los jóvenes. Ya existen multitud de centros de rehablitación de personas. Por eso los expertos están realizando estudios sobre el impacto sobre la salud mental. Hay que tener en cuenta que los jóvenes entre 16 y 24 años son los que más las usan, edades cruciales para el desarrollo emocional y psicosocial de las personas…