Las latas de atún con sello de producto responsable de las conserveras Garavilla y Salica, con sus marcas Isabel y Campos, respectivamente, ya están presentes en más de 9.000 supermercados y grandes superficies seis meses después de su lanzamiento, según ha informado Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (Opagac).
En concreto, estas latas cuentan con el sello Atún de Pesca Responsable Aenor Conform, que garantiza al consumidor final su origen responsable con el medio ambiente y socialmente sostenible.
Las conserveras Garavilla y Salica se han mostrado «satisfechas» con el resultado de esta iniciativa, puesta en marcha en junio pasado, y que tienen previsto aplicar a toda su gama de conservas de atún a lo largo de 2020.
Garavilla, que hasta septiembre había colocado en más de 9.000 supermercados españoles 4,5 millones de latas de atún claro en aceite de oliva virgen extra y atún en aceite vegetal, ambas con la marca Isabel, cerrará el año con un total de nueve millones de latas con el sello APR. En 2020, estima poner en el mercado más de 40 millones de latas con este distintivo.
Por su parte, Campos concluirá este año con 60.000 packs de tres latas certificadas de atún claro en aceite de oliva virgen extra puestos en los lineales de sus supermercados clientes.
El atún supone algo más del 50% del consumo de conservas de pescado en España. Así, la media de consumo es de 2,3 kilogramos de atún por persona al año, con un gasto anual de 17 euros, según los datos del informe elaborado por la Asociación Bermeo Tuna World Capital, con la colaboración del centro tecnológico AZTI.
España cuenta con más de 60 empresas conserveras, que generan 7.563 empleos y un impacto económico de 2.233 millones de euros. Además, producen 225.000 toneladas de conservas de atún, dato que convierte a España en el segundo productor mundial.
El sello APR garantiza a distribuidores y consumidores que el atún que comercializan y consumen, que proviene de las empresas y barcos agrupados en Opagac, está respaldado por unos exigentes estándares en materia socio-laboral y de seguridad en la mar, que superan los requisitos legales actuales.