Llevar el coche siempre a punto es importante para que no tengamos accidentes o averías inoportunas. Revisar los niveles del coche con cierta frecuencia aumentará la seguridad de nuestro vehículo en carretera.
No hace falta llevar el coche al taller para revisar los niveles de los diferentes líquidos, sino que lo podemos hacer nosotros fácilmente con ciertas indicaciones.
Así nos aseguramos de que todo esté en orden, y podemos rellenar también los depósitos de agua en cualquier momento. Dependiendo de lo mucho o poco que usemos el coche, podemos revisar sus niveles una vez al mes.
7Cómo medir los depósitos del coche
La mejor manera de medir cada depósito es con la varilla de medición, que suele estar en el propio depósito bajo el tapón. Así resulta más fácil y cómodo comprobar el nivel de cada depósito.
Para medirlo, saca la varilla de medición y límpiala, después, vuelve a meter la varilla hasta el fondo y extráela. En el extremo de la varilla hay dos muescas que indican el nivel mínimo y máximo, y tienes que comprobar que el líquido esté entre esos dos niveles.
Si el coche es antiguo, conviene revisar los niveles con más frecuencia porque es más probable que el vehículo tenga averías o fugas de líquido o lo consuman con más rapidez.