
Desde muy pequeño, Luis fantaseaba con pasar tiempo en el bosque, cuidar de los pinos, de las montañas… Su gran ilusión era ser guardabosques. Luis creció y poco a poco su sueño quedó en el olvido. Se graduó en Arquitectura, y nunca imaginó que la vida le iba a devolver años más tarde la posibilidad de hacer realidad su sueño de la infancia.