Tener sexo no es tan sencillo como sale en las películas. Eso de conocerse y que de pronto te quiten la ropa y te empotren contra la pared es, la mayoría de las veces, algo que se va sucediendo en tu mente mientras el otro te dice la hora que es.
Lo primero que tienes que hacer para ligar es olvidarte del rechazo y del miedo. Suele ocurrir que, cuando te rechazan, tu moral se va minando hasta que el miedo te puede y dejas de intentarlo. No se trata de llegar y mojar, antes hay una serie de pasos que, si el otro no lo tiene muy claro, te vas a comer un colín.
Los hombres comenten muchos fallos a la hora de entrar a ligar con la finalidad de tener sexo. El primero es pensar que las mujeres son tontas. Ten clara una cosa muy simple y sencilla. Si ella tiene bragas eróticas y está completamente depilada y preparada para tener sexo no te la has ligado ni mucho menos. Lo tenía todo planificado para llegar hasta ese punto y te ha follado ella a ti, tú ya en modo subir el ego piensa lo que quieras.
2Sinceridad
La sinceridad es algo que brilla por su ausencia. Últimamente la gente tan solo se dedica a ir al grano, pero contando mil mentiras y rodeos con tal de tener sexo. Si no quieres ser como los demás y tener más posibilidades de que todo acabe bien debes ser sincero.
Lo de sincero no me refiero a que le digas que te la pone dura con solo mirarla, el tacto y la sinceridad no están reñidos. Es preferible una vez que te haya dicho su nombre continuar con algo que sientas de verdad, como, por ejemplo: Llevo un rato mirándote sin saber si sería capaz de llegar hasta ti y mirarte a los ojos.
Es tierno, sincero y oportuno, con lo cual los puntos van aumentando. Debes salir de tu zona de confort, sincerarte no es exponerte es dar pie a la otra persona a que también lo haga.
