Deutsche Bank España y los representantes de los trabajadores han alcanzado un acuerdo sobre el registro de jornada horaria que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2020.
El texto regula cuestiones primordiales como el derecho a la desconexión digital de toda la plantilla en aras al respeto de la vida privada y familiar o de mejorar la conciliación y la salud laboral, al tiempo que determina qué es tiempo efectivo de trabajo.
También se restringen las reuniones y las comunicaciones de cualquier tipo entre las 19.00 horas y las 08.00 horas del día siguiente, además de los fines de semana, festivos y vísperas de festivo.
Del mismo modo, el acuerdo contempla la posibilidad de efectuar el registro horario desde cualquier dispositivo corporativo (ordenador, teléfono, tableta) y acceder a su historial en tiempo real a través de la aplicación que se va a desarrollar en el primer semestre de 2020.
Otras cuestión destacable son la posibilidad que tendrán todos los miembros de la plantilla de acceder a su registro en tiempo real a través de la aplicación que se va a desarrollar en el primer semestre de 2020.
La sección sindical de Deutsche Bank ha asegurado que este acuerdo supone un «profundo cambio» en la cultura corporativa de la entidad, cuya actuación incluso llegó a plantearse ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) al negarse a negociar el registro de la jornada de su plantilla.
La dirección del banco y los sindicatos llevaban negociando este acuerdo desde el pasado mes de mayo. Durante el desarrollo de las reuniones mantenidas desde entonces se ha debatido ampliamente conforme a las reglas de la buena fe con la intención de dar respuesta a las exigencias legales.
CIERRE DE OFICINAS Y 50 DESPIDOS
Deutsche Bank ha anunciado que reestructurará su negocio de banca minorista en España. El movimiento implicará el cierre de 12 oficinas y la salida de un total de 49 trabajadores. En concreto, se trata de una reducción del 6,6% de la red de oficinas, hasta las 169. El banco tiene en España alrededor de 2.400 empleados, de los que 35 serán prejubilados y 14, despedidos.
Según informó CC.OO. en un comunicado, estas medidas se enmarcan en el proceso mundial de recorte de 18.000 empleos para 2022 que anunció el banco alemán el pasado mes de julio.