España conquistó el pasado domingo su sexta Copa Davis tras cinco triunfos en una exigente semana y bajo la condición de ‘local’ (con el apoyo del público y la adversidad de la pista). Sergi Bruguera y sus pupilos consumaron el éxito en la primera ensaladera celebrada bajo el nuevo formato de Gerard Piqué. Los focos se centraron en los protagonistas pero el rédito del triunfo ensalza el valor de las marcas que han acompañado a la Real Federación Española de Tenis (RFET) en este camino. Un puñado de empresas se han revalorizado en un evento seguido por millones de espectadores de todos los rincones del mundo: desde la recién incorporada Iberia hasta una fija como Mapfre.
El movimiento de Iberia ha sido todo un ‘pelotazo’. Su exposición no ha sido tan mediática, pero su llegada se produjo en el momento oportuno. El 15 de noviembre, con los primeros tenistas desembarcando en la Caja Mágica, la Real Federación Española de Tenis (RFET) anunció un nuevo vínculo con la aerolínea, que entró directamente en la estructura de sponsors oficiales, como así refleja la web de la RFET en su escrito y en su sección de patrocinadores. El acuerdo incluyó al equipo femenino y juvenil, sin hacer pública ninguna cifra de la operación.
Iberia no está presente en la indumentaria, pero transportará a los tenistas cuando afronten compromisos con el combinado nacional. Y los actos con la aerolínea serán frecuentes. Esta misma semana, para la fotografía oficial, todos los integrantes posaron junto al logo de Iberia. Esta llegada supone el inmersión de la compañía en las altas esferas del tenis. En 2018 no entró en el Top 10 de marcas más asociadas ni a la Copa Davis ni al tenis en general, pero su irrupción en este tramo final de 2019 le dará cierto impulso en el Barómetro de Patrocinio Deportivo, donde el protagonismo por ahora lo copan otras entidades.
ESPAÑA CATAPULTA A MAPFRE Y LUANVI CON LA COPA DAVIS
La gran beneficiada del triunfo de España en la Copa Davis es Mapfre. La insistencia de la aseguradora da sus frutos: es la quinta marca más asociada a la Copa Davis y la sexta más vinculada al tenis. Es el resultado de más de una década inmersa en el deporte de la raqueta de la mano de la RFET. Un contrato que este mismo año renovaron por dos temporadas. Su presencia aspira a incrementarse, después de que patrocinadores históricos como BNP Paribas hayan abandonado el barco con la nueva Copa Davis de Piqué. Ahora la pugna estará con Rakuten (entrará con fuerza), Lexus y otras marcas que se han inmiscuido en el tenis con la llegada del futbolista.
En esas clasificaciones siempre figuran marcas deportivas históricas como Adidas o Nike. Su sustento está claro de dónde viene: los tenistas representan a sus marcas personales sobre la pista y no a las de la RFET. O lo que es lo mismo, Rafael Nadal porta a la entidad estadounidense en su pecho cuando defiende a España. En este ámbito el éxito de La Armada le ha venido como anillo al dedo a Luanvi. La marca deportiva es la única junto a Mapfre que figura en la sudadera de los deportistas, a la venta en la web de la RFET. Tras dejar a Naffta (en crisis) en 2017, la RFET firmó un contrato de tres años con Luanvi, a los que ha podido sacar rédito la empresa española.
A los patrocinadores mencionados la RFET suma un importante número de apoyos a nivel económico e institucional. El Consejo Superior de Deportes, la Asociación de Deportes Olímpicos, Marca España, LaLigaSports, Kia, El plan de apoyo al deporte y El Corte Inglés se suman a Iberia como Instituciones colaboradoras, en el segundo escalón tras Mapfre. Como patrocinadores figuran Mallorca Catering, Head, Viajes El Corte Inglés, Luanvi y Tennislife. Por último, como proveedores y colaboradores, se encuentran Bubble, Indibam Nussli, Lednix y Mid.
LA PROPIA RFET SACA TAJADA
Las marcas no son las únicas que han sacado provecho de la conquista de España: los tenistas se han embolsado una buena suma de dinero. Y la RFET, también. El tema económico fue el incentivo de Piqué para ganarse el ‘sí’ de las Federaciones. Su nueva Copa Davis tumbaba el dinero de las entradas de equipos locales y dinamitaba el tenis en rincones que nunca podrán acoger una competición de tal envergadura. Sin embargo, los tenistas se marchan satisfechos con casi medio millón de euros en su bolsillo.
La RFET se llevará algo más de un millón de euros. Una suma que con el anterior formato no hubiese generado de ninguna forma. Parte de ese dinero se destinará a la base, según han afirmado fuentes conocedoras a MERCA2. Pese al aumento de los torneos y del dinero en los Futures (ITF en el apartado femenino), España sigue sin ser una marcada referencia en este aspecto. Y con el adiós de Nadal cada vez más cerca, Miguel Díaz busca mejorar la base para garantizar un próspero futuro.