El servicio de estudios de esta entidad bancaria, BBVA Research, ha sentenciado que la inestabilidad experimentada en Cataluña a raíz de los conflictos políticos y las protestas llevadas a cabo contra la sentencia del juicio del 1-O, podrían llegar a restar «entre una y dos décimas» al PIB catalán, por lo que la economía de esta región crecería un 1,8% en 2019.
El economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, ha detallado en rueda de prensa que las previsiones de crecimiento del PIB catalán de cara a 2020 son de un 1,6% y que de cumplirse estas previsiones en el conjunto de 2019 y 2020 se podrían crear unos 115.000 nuevos empleos, lo que comportaría una reducción de la tasa de paro promedio de hasta el 11% en 2020.
En la primera mitad de año, Cataluña mantuvo un crecimiento similar a 2018, en torno al 0,5% trimestral, si bien la actividad se ha desacelerado en el segundo semestre, cuando el incremento se podría situar en un promedio del 0,3% trimestral.
BBVA lo ha atribuido también a que la demanda interna muestra una mayor desaceleración de la esperada, principalmente por la ralentización del gasto de los hogares catalanes y en mayor intensidad que en el resto de España.
La inversión en maquinaria y equipo podría moderar su avance y la de vivienda seguirá contribuyendo favorablemente a incrementar la actividad, pero con menor dinamismo.
Durante los primeros meses de 2019, el aumento de las exportaciones de bienes (2,1% nominal hasta agosto) es «débil», y el turismo, con un crecimiento del gasto turístico de extranjeros en torno al 3%, se estaría recuperando apoyado principalmente en el aumento de turistas extranjeros, que hasta agosto habría compensado la atonía del turismo nacional.
En cuanto a la evolución del empleo, en 2019 se observa un mayor dinamismo de la afiliación en las ciudades de Girona, Lleida y su entorno urbano, y en la ciudad de Barcelona, mientras que en Tarragona y las áreas no urbanas presentaron avances más reducidos y por debajo de la media regional.
La desaceleración de la creación de empleo este año se explica por la moderación de los municipios del entorno urbano de Barcelona, que compensó la aceleración de la afiliación en la capital.
BBVA SEÑALA LA DIFICULTAD PARA FORMAR GOBIERNO
En cuanto a las fuentes de incertidumbre que la entidad advierte, BBVA señala a nivel internacional los riesgos del Brexit, si bien indica que Cataluña podría ser de las comunidades menos afectadas por el menor peso del gasto turístico en el PIB regional, y el impacto en las exportaciones de bienes también puede ser limitado, ya que el Reino Unido tiene un peso del 5,5% sobre el total de las ventas exteriores.
A ello se suman las tensiones comerciales entre Estados Unidos, China y la Unión Europea, y si bien la Comunidad catalana estaría poco afectada por los cambios arancelarios en productos alimentarios, el riesgo se daría en el sector del automóvil.
A nivel doméstico, «las dificultades de llegar a acuerdos en el plano político y la falta de consenso suponen un elemento más de incertidumbre en un contexto de desaceleración económica».
Sumado a los anteriores factores, habría que valorar también el impacto negativo sobre la actividad de «los acontecimientos de octubre y noviembre, que si bien tienen un efecto limitado, de prolongarse en el tiempo podrían suponer un sesgo a la baja sobre las previsiones de crecimiento de la Comunidad».
