Seguro que los has visto en autopistas o en carreteras a la entrada de los pueblos o ciudades. Los radares didácticos en los que se ve al instante la velocidad a la que va tu vehículo se han convertido en la manera en la que la DGT nos enseña a reducir nuestra velocidad, pero no a multar.
Muchas veces no somos conscientes de lo rápido que vamos cuando estamos en el coche. Y a veces superamos la velocidad máxima permitida, sobre todo en zonas que piden reducirla de pronto.
Estos nuevos radares se han colocado en lugares estratégicos para cumplir una función didáctica. Te contamos lo que tienes que saber de ellos.
2Advertencias de
aproximación
Además de poder ver en el panel la velocidad exacta a la que circulamos, estos radares didácticos también lanzan un aviso si te aproximas a ellos con una velocidad excesiva.
Se han colocado en zonas de especial cuidado, como cerca de una zona escolar donde deberíamos prestar aún más atención al volante.
Algunos mensajes incluyen avisos de la posible sanción que le caería al conductor e incluso indican los puntos de carnet que perdería por velocidad excesiva. Así, si te acercas a la zona demasiado rápido, el radar te avisa para frenar antes de tiempo.