La aerolínea franco-holandesa Air France-KLM, liderada por Benjamin Smith, ha contabilizado un beneficio neto de 126 millones de euros en sus tres primeros trimestres de 2019, cifra que indica una reducción del 79,9% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según ha detallado el grupo este jueves.
La facturación de la compañía ascendió de enero a septiembre un 3,8%, llegando a los 20.732 millones de euros. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue de 3.218 millones de euros, un 6,5% menos que en los nueve primeros meses de 2018, mientras que el resultado de explotación fue de 997 millones, un 22,8% menos.
«AIR FRANCE-KLM MOSTRÓ RESISTENCIA EN MEDIO DE INCERTIDUMBRES GEOPOLÍTICAS Y UN ENTORNO MACROECONÓMICO MÁS SUAVE»
Benjamin Smith, consejero delegado de la compañía.
En el tercer trimestre (de julio a septiembre), la facturación del grupo creció un 2%, hasta los 7.696 millones de euros, mientras que el beneficio neto fue de 366 millones de euros, 420 millones menos respecto al año pasado (53,44% menos).
En este periodo, el resultado Ebitda cayó un 7%, hasta los 1.647 millones de euros, y el resultado de las operaciones descendió a 900 millones, un 15,5% menos.
«El rendimiento del grupo Air France-KLM en el tercer trimestre mostró resistencia en medio de incertidumbres geopolíticas y un entorno macroeconómico más suave» ha asegurado el consejero delegado de Air France-KLM, Benjamin Smith.
Además, ha asegurado que, desde la compañía, están «seguros» de que podrán cumplir con los objetivos anuales de reducir el coste unitario.
AIR FRANCE-KLM GASTÓ MÁS EN CARBURANTE
Los resultados de Air France y KLM habrían sido afectados, según han explicado, por los menores ingresos unitarios y el aumento de los costes de combustibles.
Analizando sus beneficios por separado, se destila que el grupo Air France ha registrado un Ebitda de 1.663 millones de euros hasta septiembre, lo que marca un descenso de 32 millones de euros, con un incremento del 4,8% de su facturación, hasta los 12.632 millones de euros. El resultado de las operaciones de la aerolínea gala fue de 270 millones de euros (58 millones menos).
Su filial de bajo coste Transavia elevó un 9,9% su volumen de negocio en los nueve primeros meses, hasta los 1.431 millones de euros, con un resultado de explotación de 154 millones de euros, 27 millones menos.
En cuanto a KLM, la empresa obtuvo un Ebitda de 1.535 millones de euros (199 millones de euros menos) y unos ingresos de 8.444 millones de euros, lo que supone un incremento del 1,8%. El resultado de explotación se situó en 714 millones de euros (246 millones de euros menos).
La división de carga vio caer por su parte un 3,6% sus ventas en los nueve primeros meses del año, hasta los 1.594 millones de euros.
Por el lado de los gastos, entre las mayores partidas del grupo franco-holandés el carburante sumó hasta septiembre un total de 4.117 millones de euros, un aumento del 13,7% respecto al año anterior, mientras que los de personal crecieron solo un 5,3%.
El grupo franco-holandés sigue teniendo una deuda que, a 30 de septiembre, se sitúa en 5.911 millones de euros.