Las empresas tecnológicas han encontrado otro filón diferente a la de sus productos. Muchas empresas ingresan más por publicidad que por la venta de productos o servicios. Otra buena porción de sus ganancias provienen de vender los datos que recolectan, entre ellos tus conversaciones. Y esto ocurre con productos y servicios de Apple, Google, en asistentes como Alexa de Amazon, etc.
Todo esto está especificado en los acuerdos de licencias que todo el mundo suele aceptar sin leer. Aunque en algunos casos se va más allá de lo que se especifica en esos acuerdos. El motivo de todas estas «molestias» es lo valioso que resultan los datos privados. Por un lado, se pueden usar para conocer los gustos del usuario y ofrecer anuncios personalizados para ingresar más. También pueden ser vendidos a terceros, como el caso de Facebook, para campañas, etc.
Debes saber que puedes usar algunas configuraciones o realizar algunos procedimientos para intentar reducir la cantidad de datos que se pueden estar filtrando sobre tu privacidad. Pasar unos minutos configurando estas opciones cuando compras algún dispositivo puede marcar la diferencia. En otros casos, puedes elegir alternativas a los sistemas populares que respetan más tu anonimato y privacidad.
1Aparatos que te espían
Apple HomePod
El altavoz inteligente de Apple, el HomePod, tiene el asistente virtual Siri para poder reconocer tus comandos de voz y realizar las acciones permitidas por esta inteligencia artificial.
Este altavoz está constantemente en funcionamiento en tu hogar, escuchando todo lo que dices. Y aunque Apple te venda que está muy preocupado por tu privacidad, al igual que hacen otras compañías, algunos datos son reportados.
De hecho, se sabe que trabajadores de Apple están dedicados a escuchar tus conversaciones con Siri con el fin de mejorar el asistente. Pero esas grabaciones se realizan al azar y en cualquier momento, tanto si mantienes una conversación privada, estás en un encuentro sexual, o en plena discusión…
Apple iPhone y iPad (Siri)
Los smartphones y tablets de Apple también tienen Siri como asistente virtual. Por tanto, escuchan tus conversaciones al igual que con el HomePod.
La diferencia es que el altavoz inteligente lo sueles tener en un lugar de la casa, como la cocina o el salón. En cambio, los dispositivos móviles los solemos tener cerca de nosotros, incluso en el dormitorio.
Por tanto, las grabaciones de este tipo de aparatos podrían ser incluso más íntimas. Además, se sabe que no solo escuchan cuando interactúas con ellos…
Google Nest Hub y Home
Por supuesto, el altavoz inteligente de Google también te escucha. El asistente virtual Google Assitant hace exactamente lo mismo que Apple.
Eso también afecta a otros dispositivos domóticos de Google, como el novedoso Nest Hub. Este tipo de productos se han popularizado en las casas modernas para ayudar, pero más que ayudar parece que has introducido al enemigo en casa.
Google también tiene un equipo de trabajadores dedicados a escuchar y analizar las conversaciones (en torno a un 0.2%) de todo tipo.
Amazon Echo (Alexa)
Amazon es el rey de los altavoces inteligentes. Su Echo ha conseguido venderse más que Home y HomePod. Por tanto, el asistente virtual Alexa es el más extendido por los hogares que tienen este tipo de dispositivos.
En el caso de Alexa también se almacenan tus conversaciones. Alexa recibe todo tipo de preguntas y escucha muchas cosas en los senos familiares, y debes ser consciente de ello.
Aunque es cierto que con todos los escándalos, juicios y la conciencia de la gente, cada vez hay leyes más estrictas y se suele respetar más la privacidad en algunos casos.
Smart TVs, Android TV Box y Apple TV
Las smart TVs, las Android TV Boxes y la Apple TV también son aparatos que tienen asistentes virtuales como Google Assistant, Apple Siri, etc. Por tanto, también escuchan igual que lo hacen los productos anteriores.
Operar con comandos de voz es muy cómodo, pero tiene estas desventajas. No obstante, son necesarios para personas que necesitan medidas de accesibilidad para manejar sus aparatos de tecnología. Por ejemplo, resultan muy necesarios para personas con problemas de visión o ciegos que no podrían interactuar de otro modo con ciertos dispositivos tecnológicos.
Con tanto aparato «smart» en nuestras vidas, nos deberíamos preguntar si estamos siendo nosotros los menos smart dejando que se vulneren ciertos derechos fundamentales…
Smartphones y tablets
Por supuesto, el resto de smartphones y tablets también usan asistentes virtuales y también hay que agregarlos a los aparatos que te escuchan a diario.
Este tipo de dispositivos móviles nos ayudan en el día a día y resultan muy prácticos, pero las empresas tecnológicas están elevando su poder y control a niveles demasiado altos.
No hay que dejar de usarlos, simplemente ser conscientes y presionar para que las leyes se modifiquen y se hagan respetar, puesto que en ocasiones existen leyes para proteger nuestra privacidad pero no se cumplen.
Dispositivos IoT
Probablemente es el caso más alarmante de todos. El IoT, por sus siglas en inglés, o Internet de las Cosas, con el IPv6, pretende inundar todo con dispositivos conectados.
Eso implica electrodomésticos conectados, vehículos conectados, y todo lo que puedas imaginar. Lo más triste es que también hay juguetes conectados, algunos con cámaras, micrófonos, etc., que pueden vulnerar incluso la privacidad de los más pequeños.
Quizás en algunos casos deberíamos dar un paso atrás y recuperar la privacidad que teníamos antes de que todos estos dispositivos llegasen.
Ordenadores (Cortana y otros asistentes virtuales)
Y por último, los ordenadores de sobremesa, estaciones de trabajo y portátiles también te escuchan. Cada vez más sistemas usan asistentes virtuales.
Aquí, además de Google Assistant y Apple Siri, hay que agregar Microsoft Cortana. Este último es el más extendido debido a que Windows es el sistema operativo más usado en ordenadores personales.
Sistemas operativos como GNU/Linux, FreeBSD, OpenBSD, NetBSD, Solaris, etc., aún escapan a este tipo de control y respetan más tu privacidad y anonimato. Aunque no estén del todo libres de funciones de espionaje, pero sí que son infinitamente inferiores a Android, iOS, macOS, y Windows.