Tu cuerpo es el que más sufre el sedentarismo. Es por eso que en Japón se inventaron lo que hoy es un reto viral: “Hacer diez mil pasos al día”. Diez mil pasos son aproximadamente unos siete kilómetros. No es lo mismo los pasos que dé una persona con las piernas largas que una con las piernas cortas.
Se trata de hacer ejercicio diario y que tu cuerpo no sufra las consecuencias tales como, obesidad o problemas cardiovasculares. El reto es de los más saludables que existen y se trata de dar unos diez mil pasos al día. No es bueno obsesionarse con esta cantidad; si estás entre los siete mil y los diez mil, “felicidades”, no eres una persona sedentaria. No obstante, se dice que para tener una vida activa lo recomendable es andar unos doce mil pasos, que son más o menos nueve kilómetros.
Si lo que quieres es quitarle a tu cuerpo los kilos de más necesitas una dieta que sea saludable y equilibrada, además de andar un mínimo de media hora a una velocidad considerable e ir aumentándola a medida que te sientas cómodo con ella y veas que ya no te cuesta trabajo.
Debes ir poco a poco, «Roma no se hizo en un día». Todo ejercicio necesita su calentamiento y posterior estiramiento. Es recomendable que te marques objetivos realizables y que los vayas subiendo de forma paulatina. Lo más importante si quieres seguir este reto es que apuntes tus victorias.
Te diré lo que le sucede a tu cuerpo si andas esos mil pasos al día:
Corazón y cuerpo
Cuando caminas diez mil pasos al día tu cuerpo lo nota de forma saludable. El corazón se beneficia de ese deporte que has realizado. El oxigeno en sangre mejora y ayuda a que la circulación de tu cuerpo también lo haga. Esto es directamente proporcional a tener un corazón sano y menos problemas cardiovasculares a la vista.
Pulmones
Andar hace que respires mejor y más, lo que hace que tus pulmones se vuelvan más fuertes y más resistentes. Cuanto más oxígeno tomas, tu cuerpo lo reparte de forma extraordinaria en los distintos órganos haciendo que estos trabajen mejor.
Intenta que esos pasos sean por sitios en donde haya poca contaminación, lejos de las carreteras o el centro de la ciudad. Lo ideal sería que, ya que andas, también metas oxígeno más sano en tu cuerpo.
Cuerpo, pasos y mente
Caminar hace que tu cuerpo libere endorfinas y que el flujo de sangre que va hasta el cerebro mejore. Las endorfinas te harán sentir bien con lo que haces y mejorará la circulación de la sangre, hará que pienses con claridad y evitarás ictus o trombos cerebrales.
Caminar por zonas tranquilas y relajadas hace que tu estado de ánimo mejore, ayuda a combatir el estrés y la ansiedad del día a día y mejora los estados depresivos. A veces, tan solo hay que dar otro paso más para llegar a estar mejor con el mundo y, lo más importante, contigo mismo.
Huesos y músculos
El reto de los diez mil pasos es especialmente beneficioso para las mujeres que tienen la menopausia. El cuerpo, tras la menopausia, puede sufrir problemas de osteoporosis y caminar hace que la densidad del hueso mejore. Por lo que ponte un chándal y vete a dar un paseo.
Por otra parte, andar también ayuda a tonificar los músculos y a coger más masa muscular y fuerza. Después de estar al menos 21 días realizando el reto de los diez mil pasos notarás que tienes más energía, pero también elasticidad, con lo que se reduce el riesgo de que tengas alguna lesión y se minimizan los dolores y achaques.
Enfermedades
El reto de los diez mil pasos es bueno para las personas que tienen diabetes, porque andar hace que la glucosa en sangre se estabilice y se controle mejor. Lo primero que les dicen a los enfermos con diabetes es que si quieren que la insulina sea más efectiva deben despegar el cuerpo del sofá.
Los hipertensos también pueden beneficiarse de esto de los diez mil pasos. Si tu circulación y tu sangre mejoran, tu tensión arterial, por ende, baja y tienes menos riesgos de sufrir un infarto.