El presidente y máximo accionista del grupo Quabit, Félix Abánades, ha reforzado su posición dominante en el capital social de la inmobiliaria con la integración de Rayet Construcción en el conglomerado empresarial alcarreño.
Quabit ha cerrado este lunes la compra del 82,9% del capital de Rayet Construcción, constructora controlada por el propio Félix Abánades, tras anunciarla en mayo. El precio final ha quedado determinado en 14,3 millones de euros por el 82,95% de las acciones de Rayet, según ha informado la empresa a través de un hecho relevante remitido este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El importe de la transacción es finalmente superior al inicialmente pactado de 13,10 millones de euros, diferencia que Quabit achaca a la «actualización de la posición financiera neta y a los ajustes realizados durante el proceso de ‘due diligence’.
Como consecuencia de la formalización y cierre de la operación, la participación directa e indirecta de Félix Abánades en Quabit quedará fijada en el 20,309% del capital social. Hasta la fecha controlaba el 19,1%. El valor de mercado de esta participación ronda los 24,32 millones de euros en la actualidad.
Las acciones de Quabit no viven su mejor momento en el parqué madrileño. De hecho, el pasado 2 de octubre tocaron un mínimo histórico en 0,78 euros. En lo que va de año presentan un retroceso del 37,7%. Además, el segundo mayor accionista de la compañía, el banco privado suizo Julius Baer, ha vendido 101.313 títulos en el cuarto trimestre del año, según los datos de Bloomberg.
LA LÍNEA ESTRATÉGICA DE QUABIT
La toma de control de la constructora se enmarca en las medidas tomadas por Quabit dentro de su estrategia anunciada en la presentación de la actualización del Plan de Negocio 2018-2022 publicada el pasado 16 de mayo. El objetivo de la compañía es controlar las tensiones en el mercado de edificación de viviendas y garantizar los plazos de construcción y entrega de sus pisos.
El 20,3% de Félix Abánades en Quabit ronda un valor de mercado de 24,34 millones de euros, aunque la acción de roza mínimos históricos
La inmobiliaria de Guadalajara tuvo que revisar un 6% a la baja su plan de entregas de viviendas inicialmente programado. De esta forma, al cierre del periodo comprendido entre 2018 y 2022 prevé dar las llaves de entre 7.200 y 7.600 pisos, frente a los 7.888 inicialmente previstos.
La inmobiliaria, al igual que otras que afrontan ajustes similares, achacó la revisión de su plan de negocio a los dilatados plazos de consecución de licencias de obras y a los retrasos de las obras de construcción.
Así, entonces anunció que pretendía atajar estos retrasos dotándose de su propia constructora. Según indicó entonces, Quabit confía en que esta operación le permita «asegurar los plazos de construcción mínimos necesarios para garantizar las entregas» de pisos y el «mínimo impacto posible de la inflación de costes». Además, también busca entrar en la actual tendencia a la industrialización de la edificación de viviendas.
QUABIT LOGRA MÁS TERRENOS EN VALENCIA
El mes pasado Quabit anunció un principio de acuerdo con Egusa (Ayto. de Alboraya, Valencia) para liquidar la deuda de más de 26 millones. La deuda estaba dividida en dos partidas. Por un lado, 23,4 millones de euros que Quabit adelantó al municipio valenciano para el desarrollo del Sector “UE-2 Port Saplaya” y que finalmente quedó paralizado. Y por otro, 2,9 millones de euros en concepto de intereses legales devengados sobre la cantidad principal desde febrero de 2014, fecha en la que Quabit reclamó por incumplimiento la resolución del contrato.
A cambio, Egusa entregará a Quabit terrenos de Port Saplaya, en total 52.000 metros cuadrados, donde la promotora tiene previsto construir unas 500 viviendas. Los terrenos forman parte del “UE-2 Port Saplaya”, uno de los pocos sectores existentes en primera línea de playa que pueden desarrollarse en la actualidad, estratégico por su capacidad de desarrollo a medio plazo, su alto potencial de revalorización y por su excelente localización, contiguo a la ciudad de Valencia. Se encuentra ubicado en Port Saplaya, zona residencial costera en el término municipal de Alboraya, a continuación de la playa de La Malvarrosa–Patacona, a 15 minutos del centro de Valencia, perfectamente comunicado por la V-21.
El Sector tiene la calificación de suelo urbano, con casi 110.000 metros cuadrados de superficie, con uso dominante residencial para más de 850 viviendas y terciario. Quabit, como propietaria mayoritaria en un 60%, tiene previsto reactivar el Sector y acometer de forma inmediata las gestiones urbanísticas pendientes para comenzar a promover sus proyectos residenciales en un plazo máximo de tres años.