La incertidumbre planea sobre As Pontes (A Coruña) desde que Endesa anunciara la paralización de la central térmica de carbón de la localidad. En un hecho relevante remitido a la CNMV la empresa anunció hace unos días la “discontinuidad” de todas sus plantas de carbón en España, por lo que, aunque todavía no puede hablarse de cierre, las partes implicadas llevan tiempo buscando soluciones en previsión de que éste llegará en poco menos de año y medio.
Los trabajadores están por encontrar alternativas al carbón relacionadas con los biocombustibles, manteniendo el funcionamiento de la central y su impacto socio-laboral en la zona pero con otro combustible, esta vez renovable. Por su parte, la empresa opta por la energía eólica para compensar la ‘descarbonización’ de la comarca. Las pruebas y los estudios técnicos se encargarán de dar y quitar razones y aunque la transición «más justa» pasa por los biocombustibles, la técnica parece imponer otras opciones renovables como las únicas viables.
En la carrera por encontrar una salida laboral a la comarca gallega, fuertemente dependiente de la térmica de Endesa, los trabajadores defienden que se siga apostando por la investigación y las pruebas de viabilidad de proyectos relacionados con el uso de biocombustibles en sustitución del carbón. Luis Varela (UGT), presidente del Comité de Empresa de la central, se refiere concretamente a “lodos”, biomasa procedente de “trama de hoja y subproducto, de bajo valor en el mercado” que, aunque sea en parte, ayudaría a poner en valor éstos y otros “residuos” locales. Los trabajadores miran con esperanza al aprovechamiento de recursos forestales como la salida laboral al cese del carbón, que supondría, según sus planes, el mantenimiento de muchos puestos de trabajo, -ahora 700 personas empleadas- y también una salida a los transportistas de la zona –unos 150- cuya actividad también está vinculada a la central. La apuesta de los empleados es que la actividad económica siga girando alrededor de la central térmica, pero empleando una fuente de energía renovable –biocombustible- para la generación de electricidad.
“El sentido común dicta que se trate por todos los medios de buscar una solución con biocombustibles”, dice el alcalde
Sin embargo, expertos consultados por MERCA2, encuentran serias dificultades en que un proyecto de generación alimentado con biocombustibles resulte rentable para una planta eléctrica de las dimensiones de la de As Pontes. Supondría asumir un proyecto ambicioso, con elevadas inversiones que tendrían que involucrar a las administraciones, y con motivaciones que trasciendan la mera rentabilidad empresarial.
El Ministerio para la Transición Ecológica se aferra a la fase incipiente del proceso para no pronunciarse. Todas las respuestas del MITECO a preguntas formuladas por MERCA2 remiten al comunicado emitido tras la reunión celebrada el 2 de octubre a la que asistieron responsables de la empresa, representantes del propio Ministerio, de la Xunta de Galicia, del Ayuntamiento de As Pontes, de los sindicatos con representación en la central y del colectivo de transportistas. Una reunión que, según el Ministerio se convocó “con el objetivo de conocer de primera mano los planes de la compañía y abrir una vía de comunicación permanente con los trabajadores y vecinos de la comarca para analizar, de forma conjunta, todos los posibles escenarios de futuro, articular respuestas a corto plazo y planificar, con anticipación, actuaciones posteriores en la comarca”. En definitiva, sirvió para activar los mecanismos de la Estrategia de la Transición Justa en este caso, pero sin muchos más avances concretos.
Por parte de la Xunta de Galicia, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, ha criticado que el Gobierno, «lamentablemente», no tiene ninguna propuesta ni medidas concretas ante la aceleración del cierre de la central de carbón, y ha reclamado un proceso realista para «no crear falsas expectativas», informa Europa Press.
SI LA TÉCNICA SE IMPONE AL SENTIDO COMÚN
“Vamos a pelear mucho”, ha asegurado Valentín González. El alcalde de As Pontes ha insistido en la inversión cercana a los 220 millones de euros realizada por Endesa y en la necesidad de poner en valor este esfuerzo de la empresa. Además, ha remarcado en declaraciones a MERCA2 las enormes diferencias entre generar electricidad a partir de carbón y generarla a partir de energía eólica como pretende la empresa, dado el escaso nivel de empleo que generan los parques eólicos. La central consta de cuatro grupos generadores con una potencia total de 1.468,5 MW. Para González, “el sentido común dicta que se trate por todos los medios de buscar una solución con biocombustibles”, que sería lo mejor para mantener el tejido económico de la zona, pero si esta opción no es viable “que la técnica sea la que se imponga al sentido común” y no otros intereses.
Por eso, González considera imprescindible la implicación del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) junto a Endesa y universidades gallegas para analizar y validar si la central puede funcionar con biocombustibles (incluso de forma híbrida con carbón).
Aunque, el alcalde de As Pontes considera que en esta situación conviene “ser realista”, es decir, “a nadie le interesa un proyecto deficitario que desaparezca a los pocos años”, pero también aboga por no escatimar esfuerzos en realizar todas las pruebas, investigaciones e incluso las inversiones necesarias –y aquí apela directamente al Ministerio- antes de descartar esa opción, para proteger la continuidad laboral de los trabajadores afectados. En este sentido, González ha reclamado una “transición justa” en toda la extensión del concepto, y en la que “tiene que involucrarse el Ministerio”.
EL ESCEPTICISMO DE LOS EXPERTOS
Sin embargo, expertos del sector energético consultados por MERCA2, muestran su escepticismo sobre la viabilidad de la biomasa dada la envergadura de la central térmica de As Pontes. En primer lugar, coinciden en que habría que realizar una inversión muy elevada para incorporar tecnología adaptada el nuevo biocombustible. Por otro lado recuerdan las cantidades de biomasa necesarias para alimentar una central de estas características, una demanda que no se puede cubrir sólo con recursos de la zona y que obligaría a recurrir a otros mercados, fuera de Galicia, encareciendo el proceso.
Asimismo recuerdan que otra de las opciones barajadas, la cocombustión -la combustión conjunta en este caso de carbón y biomasa-, para ser eficiente exige una mezcla con un bajo porcentaje de biomasa, que los expertos cifran entre el 3 por ciento y el 10 por ciento. Además, la cocombustión no sería más que una solución de transición para reducir emisiones hasta la aplicación de una medida definitiva, más sostenible.
EL RETO DE LA «TRANSICIÓN JUSTA»
Así las cosas, al tiempo que admite que un proyecto deficitario no sería la solución, el alcalde del municipio gallego señala al Ministerio como responsable de plantear esa «transición justa» de la que habla. Para González, el «verdadero reto» de la transición energética es «evitar la deslocalización y la destrucción de empleo», y se lamenta de las profundas contradicciones en las que se incurre en nombre de este cambio de modelo.
«Vestas cerró su fábrica de aerogeneradores de León -Villadangos del Páramo-» en septiembre de 2018, dejando a 370 empleados directos en la calle, y un impacto económico en 2.000 personas de la comarca, según los sindicatos, «y al poco tiempo comenzó la construcción de un parque eólico en la provincia de Burgos, a escasos kilómetros, que tuvo que importar los componentes de China», se ha lamentado González. El alcalde gallego reclama ayudas para las empresas, «hay que apoyar a Endesa, para que le puedan salir los números», concluye.