La inglesa Just Eat, tras anunciar un principio de acuerdo de fusión con la holandesa Takeaway.com, necesita aumentar su penetración entre un 10 y un 15% en sus mercados clave para mantener el crecimiento de los ingresos y construir una escala que le permita mejorar el Ebitda por pedido. Por ahora, según el último análisis de Bloomberg, está sacrificando la rentabilidad en estos países para luchar contra sus rivales.
El canal de penetración local, que va desde menos del 10% hasta casi el 30%, significa que Just Eat y Takeaway.com tendrían que reconfigurar los planes para la puesta en funcionamiento del sistema de envío propio si finalmente se fusionan.
La entrega a través de flotas propias o mensajeros es clave para impulsar la penetración de este servicio de entrega a domicilio en al menos del 10% de una población estimada de 450 millones de personas (mayores de 15 años), según los analistas de Bloomberg. No obstante, apuntan, es probable que una pequeña porción de los pedidos siga, incluso a medida que aumenta la escala, subvencionada por las actividades básicas de marketplace.
Los servicios de entrega a domicilio presentan un mayor potencial de ser rentables en ciudades grandes y altamente pobladas, como en Canadá y Australia, mientras que será más costoso su lanzamiento en áreas menos densas.
Las compañías más veteranas de entrega de comida como Just Eat, Takeaway.com y GrubHub en Estados Unidos pueden alcanzar su propio servicio logístico del 30% del volumen de pedidos, en opinión de Bloomberg. Lograr y mantener la rentabilidad depende de defender sus mercados a medida que la escala impulsa la eficiencia. Aunque el despliegue gradual de la logística tiene sentido desde el punto de vista económico, la expansión continua es clave para luchar contra la feroz competencia de Deliveroo (lanzado en 2013, que dio un buen bocado a la cuota de Just Eat en Londres) y Uber Eats (inicio 2015-2016).
El crecimiento de los pedidos puede verse afectado por los temores de recesión, resaltados por una desaceleración en Alemania, de donde provendrá hasta la mitad de los ingresos de Takeaway.com en 2019, y un posible Brexit sin acuerdo en el mercado central de Reino Unido de Just Eat. Aunque el crecimiento de los ingresos parece no estar relacionado con los cambios en la confianza del consumidor, los analistas de Bloomberg tienen dudas de que ese sea el caso, ya que las principales compañías de entrega de comida nunca se han enfrentado una crisis económica desde sus salidas a Bolsa (Just Eat en 2014).
Sin embargo, el aumento en la frecuencia de los pedidos parece estar impulsada por clientes millennials, cuyos hábitos de gasto pueden tardar más en adaptarse debido a su falta de experiencia para vivir en una época de recesión. Un descenso de los pedidos telefónicos en beneficio del móvil o el ordenador y una red de restaurantes ampliada pueden generar nuevos usuarios, impulsando la penetración en el mercado y la eficiencia del servicio, concluyen los analistas.
JUST EAT Y TAKEAWAY, EN PÉRDIDAS
Las compañías de reparto a domicilio Just Eat y Takeaway.com presentaron pérdidas en el primer semestre del año. Just Eat registró unos números rojos de 5,6 millones de libras (6,1 millones de euros); Takeawey.com 37,4 millones de euros.
En el caso de Just Eat, la empresa británica obtuvo pérdidas por importe atribuido de 5,6 millones de libras esterlinas (6,1 millones de euros) en los seis primeros meses de 2019, frente al beneficio neto de 37,2 millones de libras (41 millones de euros) del mismo periodo de 2018. Por su parte, la holandesa Takeaway.com cerró el primer semestre con pérdidas de 37,44 millones de euros, ampliando así un 154% los ‘números rojos’ registrados en la primera mitad de 2018.
Just Eat y su competidora Takeaway.com anunciaron a finales de julio un principio de acuerdo sobre los aspectos clave para su posible fusión mediante un intercambio de acciones que daría origen a una de las mayores plataformas online de envío de comida a domicilio con más de 360 millones de pedidos por un valor de 7.300 millones de euros en 2018.
Según los términos del acuerdo, los accionistas de Just Eat recibirán 0,09744 acciones de Takeaway.com por cada título de la empresa en su poder, lo que valora en 7,31 libras cada acción de Just Eat, un 15% por encima de su precio el pasado 26 de julio. En función de esta ecuación de canje, al cierre de la transacción los accionistas de Just Eat controlarían el 52,2% de la nueva compañía y los de Takeaway.com alrededor del 47,8%.