Las huelgas convocadas para el mes de septiembre no harán cambiar de idea a Ryanair. La compañía ha asegurado este jueves que el cierre de las bases de invierno en Canarias «es un hecho irreversible». La aerolínea culpa de esta situación al retraso en las entregas de los 737 MAX con los que contaba para este invierno, y que fueron suspendidos en marzo tras dos accidentes. Ryanair ha explicado que esta circunstancia les ha obligado a cerrar algunas bases «deficitarias» y a reducir el número de aviones en otras.
En un comunicado, la aerolínea irlandesa, que prevé cerrar las bases de Las Palmas, Tenerife Sur, Girona y Lanzarote, ha explicado que las bases como las de las Islas Canarias «generan grandes pérdidas durante la temporada de invierno» y que casi todo su tráfico que origina en el extranjero, por lo que «puede ser atendido por otros aviones basados en otros países de la Unión Europea sin los altos costes e ineficiencia resultante de basar aviones y tripulación» en el archipiélago canario entre noviembre y marzo.
Ryanair ha instado a los sindicatos USO y Sitcpla, convocantes de la huelga de diez días para septiembre a la que están llamados los tripulantes de cabina (TCP), y al sindicato Sepla, que ha anunciado cinco días de paros, a que desconvoquen las huelgas «sin sentido» previstas».
La compañía irlandesa ha asegurado que están «condenadas al fracaso» debido a que el cierre es «irreversible en aquellas bases de invierno en pérdidas hasta que se resuelvan los retrasos en la entrega de los aviones 737 MAX. «Convocar tales huelgas a tan solo ocho semanas del ‘Brexit’ es un acto de irresponsabilidad por parte de estos sindicatos», ha añadido.
Según la compañía, los paros «no tienen otro propósito que alterar los planes de viaje de nuestros clientes y familias durante la vuelta de las vacaciones».
Ryanair espera cancelar menos de ocho de sus más de 950 vuelos diarios hacia y desde España los días 1 y 2 de septiembre «gracias al gran trabajo de la mayoría de nuestros pilotos y TCP que ya han confirmado que operarán según el horario previsto o se ofrecerán como voluntarios para trabajar en sus días libres con el fin de no alterar los planes de viaje de los clientes y sus familias».
Todos los pasajeros de los seis vuelos cancelados el domingo 1 de septiembre y los ocho cancelados el lunes 2 de septiembre ya han recibido notificaciones por correo electrónico o mensajes de texto SMS para informarles de sus opciones, bien un cambio de vuelo de forma gratuita o un reembolso completo.
HUELGAS DE TCP Y PILOTOS
Los sindicatos de TCP USO y Sitcpla han convocado diez jornadas de huelga los días 1, 2, 6, 8, 13, 15, 20, 22, 27 y 29 de septiembre tras el fracaso de la mediación. Este viernes volverán a reunirse en la Dirección General del Trabajo con representantes de Ryanair para intentar acercar posturas.
Mientras, el Sepla ha presentado un preaviso para los días 19, 20, 22, 27 y 29 de septiembre, pendiente de una convocatoria formal dependiendo del resultado de la mediación solicitada ante el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA).
Ambos casos están motivados por el anuncio de la compañía de cerrar en enero las bases de Girona, Lanzarote, Tenerife Sur y Las Palmas de Gran Canaria, lo que supondría un ajuste de plantilla que afectaría a 512 empleados entre TCP y pilotos, justificándose en el retraso en las entregas de los 737 MAX y la baja rentabilidad de estas bases, además de la incertidumbre del ‘Brexit’.
En concreto, el ajuste de plantilla se desglosan en 164 personas en Girona, 156 en Tenerife Sur, 110 en Las Palmas y 82 en Lanzarote. A estas bases, se suma el anuncio cierre de su base en Faro (Portugal).
Desde USO han denunciado este mismo jueves que la compañía está enviando correos electrónicos a algunos de sus trabajadores para que indicaran si iban a participar en la huelga y si trabajarían voluntariamente en sus días libres para «minimizar los efectos en los pasajeros».