Al igual que nos pasa a las personas, los perros también pueden sufrir golpes de calor. Se produce cuando sube la temperatura corporal de manera muy brusca y el organismo no es capaz de compensarla. En los casos más graves, puede llevar hasta la muerte del perro.
Conviene estar atento a nuestro perro durante estos días de verano de tanto calor, para comprobar que se encuentre a gusto y de que no esté sufriendo una disfunción multiorgánica por culpa del golpe de calor. Si prevenimos estos aumentos de temperaturas y actuamos con rapidez no podremos en peligro a nuestra mascota.
3Cómo prevenir el golpe de calor en tu perro
Para evitar que se empiecen a dar los primeros síntomas, lo mejor es que tomemos algunas precauciones, sobre todo en verano. Debemos ofrecer al animal agua fresca de manera frecuente. No debemos dejarlos encerrados en lugares calurosos, y jamás en el coche. Ojo con las ventanas a las que le da el sol directamente y se produce efecto invernadero.
Además, deberemos evitar los ejercicios intensos y el sol directo durante las horas centrales del día, cuando más calor hace. Si viajamos en coche, hay que hacer paradas frecuentes para que el perro descanse a la sombra, se refresque, y beba agua.
Antes de que sea demasiado tarde es mejor prevenir antes de tiempo.