La alopecia puede afectar solo al cuero cabelludo o a todo el cuerpo. Puede ser causada por factores hereditarios, cambios hormonales, una enfermedad o medicamentos. Cualquier persona puede tener caída del cabello, pero es más común en los hombres.
La alopecia es la pérdida anormal del cabello. Cuando una persona pierde más de 100 cabellos al día se considera que sufre una alopecia, también llamada calvicie.
La alopecia más común es la llamada alopecia androgenética, suponiendo más del 90% de los casos de alopecia. Otros tipos de alopecia son la cicatricial, la areata y la difusa, fibrosante que te explicaré más adelante.
Algunos tipos de pérdida del cabello son temporales mientras que otros son permanentes.
Causas alopecia y calvicie
Genética: El motivo más frecuente de la alopecia es el factor hereditario llamado calvicie de patrón masculino o calvicie de patrón femenino. Suele ser de forma gradual a medida que se envejece y en patrones predecibles una línea capilar en retroceso en los hombres y reducción del grosor del pelo en las mujeres.
Cambios hormonales y trastornos médicos:
- Trastornos hormonales: Como los cambios hormonales del embarazo, el parto, la menopausia y los problemas de tiroides.
- Los trastornos médicos: Serían la alopecia areata, (la caída del cabello en parches), las infecciones del cuero cabelludo (como la tiña), y la tricotilomanía, (un trastorno de tirones de cabello).
Medicamentos y suplementos: Puede ser un efecto secundario de algunos medicamentos, como los que tratan el cáncer, la artritis, la depresión, los problemas cardíacos, la gota y la presión arterial alta. Con la radioterapia de la cabeza puede ser que el pelo no vuelva a crecer igual.
Estrés: Después de sufrir estrés puedes tener una reducción del grosor del cabello. Este tipo de pérdida del cabello es temporal.
Peluquerías: Según qué tipo de peinado uses frecuentemente puedes tener un tipo de pérdida de cabello llamado alopecia por tracción. Los tratamientos con aceite caliente o de permanente pueden inflamar los folículos y causar la pérdida del cabello. Si hay «cicatrización», la pérdida de cabello puede ser permanente.
Síntomas
Entre los signos y los síntomas de la pérdida del cabello se pueden incluir los siguientes:
- Pérdida del grosor del cabello gradual en la parte superior de la cabeza. Este es el tipo más frecuente de pérdida del cabello, y afecta tanto a hombres como a mujeres a medida que envejecen. En los hombres, la línea del cabello comienza a retroceder desde la frente en una línea que se asemeja a la letra M. Las mujeres suelen conservar la línea del cabello en la frente, pero presentan un ensanchamiento en la separación del cabello.
- Puntos de calvicie circulares o en parches. En algunas personas se hacen presentes puntos de calvicie suaves, del tamaño de monedas. Este tipo de pérdida del cabello suele afectar solamente al cuero cabelludo, pero en ocasiones también se produce en la barba o las cejas. En algunos casos, puede existir picazón o dolor en la piel antes de que se caiga el cabello.
- Pérdida repentina del cabello. Un choque físico o emocional puede aflojar el cabello. Es posible que se caigan mechones de cabello al peinarse o lavarse el cabello, o incluso luego de tirarlo con suavidad. Este tipo de pérdida del cabello suele causar el afinamiento general del cabello en lugar de parches de calvicie.
- Pérdida del cabello en todo el cuerpo. Algunos trastornos y tratamientos médicos como la quimioterapia contra el cáncer pueden ocasionar la pérdida del cabello en todo el cuerpo. Por lo general, el cabello vuelve a crecer.
- Parches de descamación que se diseminan en el cuero cabelludo. Este es un signo de tiña. Puede estar acompañado de cabellos quebrados, enrojecimiento, inflamación y, en ocasiones, secreciones.
Clases de alopecia
Alopecia Androgenética
Este es el tipo de alopecia más común. Más del 95% de las personas con alopecia es el tipo androgenética. Se da más entre los hombres que entre las mujeres y suele empezarse a ver entre los 30 y 40 años.
- El pelo crece cada vez más fino lacio, incluso si su cabello natural es rizado.
- El crecimiento del pelo se ralentiza hasta que poco a poco va cayendo y no vuelve a crecer jamás.
Para solucionar estos casos existen tratamientos como el plasma rico en plaquetas o la regeneración de alta frecuencia.
La alopecia Androgenética masculina
Afecta aproximadamente al 75% de los hombres, pudiéndose iniciar en la adolescencia, aunque lo más normal es que los primeros signos se hagan evidentes entre los 30 y 40 años.
Las causas principales de la alopecia androgenética son la predisposición genética y un aumento en la acción de las hormonas masculinas o andrógenos. Es un proceso lento que se produce de forma progresiva a lo largo del tiempo.
En el caso de los hombres, la alopecia comienza a manifestarse en la zona de las entradas, de la coronilla o ambos. Hasta que solo queda pelo en los lados y zona posterior de la cabeza.
Alopecia Androgenética femenina
La alopecia androgenética puede llegar a afectar a casi el 50% de las mujeres. Siendo más habitual cuando comienzas con la menopausia y la disminución de hormonas femeninas.
En la menopausia los andrógenos que anteriormente estaban inhibidos por la mayor presencia de estrógenos, empiezan a actuar sobre el cabello de la misma manera que en los hombres, debilitándolo y provocando una caída irreversible si no es tratada a tiempo.
Afecta en especial a la zona superior de la cabeza, permaneciendo inalterable la línea frontal del cabello. Sin embargo, en casos muy avanzados podría incluso afectar de forma difusa a todo el cabello.
Alopecia difusa
En este tipo de alopecia, el pelo se pierde de forma generalizada y progresivamente. Afecta tanto a hombres como a mujeres y puede llegar a concluir en una calvicie total.
La única forma de tratar este tipo de alopecia es acudir cuanto antes y hacer trasplantes capilares. El cabello va debilitándose y creciendo cada vez más lento y lacio hasta que cae y no vuelve a crecer.
Alopecia Areata
En la alopecia areata aparecen placas de calvicie de forma redondeada en cualquier parte del cuerpo, lo más común es su aparición en el cuero cabelludo y la barba. La zona afectada por la pérdida de cabello presenta un aspecto sano, sin descamaciones, inflamaciones o enrojecimiento.
Afecta al 2% de la población con problemas de pérdida de pelo y suele surgir alrededor de los 20 años.
Con este tipo de alopecia, el pelo natural vuelve a crecer tras el correcto tratamiento médico.
Alopecia cicatricial
La alopecia cicatricial se caracteriza por la aparición de tejido fibroso cicatricial donde antes existían folículos pilosos. Las cicatrices impiden que el pelo crezca de forma normal. La zona se reconoce por que el cuero cabelludo está enrojecido y escamado.
Este tipo de alopecia se produce por las consecuencias de alguna enfermedad o traumatismo, como pueda ser lupus, infecciones bacterianas, hongos, tumores o heridas.
No es posible la regeneración del folículo de pelo de forma natural
Alopecia fibrosante
Afecta principalmente a mujeres. Se suele presentar en la menopausia. El cabello se pierde de forma gradual desde la zona frontal de la cabeza y laterales, en forma de diadema.
La piel de la zona afectada se vuelve más pálida y fina y la evolución de la alopecia puede durar años. El tratamiento que se recomienda en este tipo de alopecia es realizar algún tipo de tratamiento fortalecedor y en casos más extremos, recurrir al trasplante capilar.
Prevenir
- No te peines de forma tirante como lo son las trenzas, los rodetes o las colas de caballo. Evita retorcerte el cabello, frotarlo o tirarlo de forma compulsiva.
- Tienes que poner en una balanza si quieres estar guapa durante un tiempo o con alopecia en unos años… Los tratamientos fuertes como los rizadores calientes, las planchas para el cabello, los tratamientos con aceite caliente y las permanentes pueden provocar alopecia.
- Deja de fumar. En algunos estudios se ha demostrado una relación entre el tabaquismo y la calvicie entre los hombres.
- Si te sometes a tratamiento con quimioterapia, consulta con el médico sobre un gorro de frío. Estos reducen el riesgo de que se pierda el cabello durante la quimioterapia.