En verano, uno de los deportes en los que se está más «fresquito» es el buceo, pero además tiene muchos beneficios que seguramente desconozcas. ¿Sabías que es bueno para la salud física y metal? El buceo es uno de los deportes más completos y relajantes que existen.
Puedes llegar a pensar que el buceo es algo «complicado», pero nada que ver con la realidad, es fácil y seguro, siempre que vayas con el equipo adecuado y SIEMPRE acompañado de monitores expertos, tomando las medidas de seguridad necesarias.
El único requisito que hay que tener para practicar buceo es no tenerle miedo al agua, porque realmente saber nadar tampoco es imprescindible, se trata de hundirte.
Voy a decirte algunas cosas por las que practicar el buceo es beneficioso para tu salud:
Amplía la capacidad pulmonar
Es importante que aprendas a respirar debajo del agua con el equipo de oxígeno. Hacerlo bien es una de las claves del buceo.
Cuando respiras en condiciones:
- Gastas menos oxígeno de la bombona.
- Mejora el funcionamiento del corazón.
- Fortalece la circulación de la sangre.
- Amplía la capacidad pulmonar.
- Estimula el sistema linfático.
- Libera toxinas.
Respirar correctamente es lo primero que te enseñan a hacer los instructores de buceo. Una vez que sabes controlar tu respiración bajo agua también lo haces bien estando en la tierra, por lo que tu oxigenación mejora considerablemente.
El buceo como ejercicio
La resistencia que ofrece el agua no es comparable con la que nos pone el aire cuando nos movemos. Todos los músculos del cuerpo están trabajando en el instante en el que entras al agua y si te mueves y nadas, más aún. Con lo cual, estás fortaleciéndolos.
Mejora la habilidad psicomotriz y la orientación espacial, ya que mantener el equilibrio dentro del agua hace que trabajen los dos hemisferios del cerebro. Ayudas a mejorar tu coordinación.
El buceo es un gran ejercicio quema grasas. En una hora de inmersión puedes llegar a quemar hasta 220 calorías, porque haces un trabajo considerable cada vez que nadas en la superficie, te sumerges o cargas con el peso del equipo en la espalda. Ejercitas cada músculo y cada tendón de tu cuerpo.
El buceo trabaja todos los músculos del cuerpo
Autoestima y buceo
Además de los beneficios físicos que ya te he dicho, el buceo también ayuda a tu mente y a tu autoestima.
Como cada cosa que necesita un aprendizaje diario, el buceo requiere que cada día vayas «superándote» un poco más; la práctica hace al maestro, y en este caso no es diferente. Con cada logro nuevo te vas sintiendo más cómodo y más libre, con lo que tu confianza en ti mismo aumenta.
Aparte, el buceo ayuda a romper con las rutinas diarias y con la vida sedentaria, al obligarte al salir de casa y desplazarte a sitios maravillosos que te llenarán de paz y tranquilidad como puede ser la profundidad del mar.
Reduce el estrés
Si meterte en una bañera y cubrirte de agua hasta las orejas te relaja, imagina lo que sería poder estar totalmente ingrávido mirando los arrecifes o los peces a tu alrededor.
El buceo te aporta un gran ejercicio para la mente, te tranquiliza y te relaja consiguiendo que olvides los problemas del día a día.
Si estás viviendo un episodio de estrés y ansiedad en tu vida puedes intentar practicar este deporte. Sumérgete en el agua y relaja los sentidos, allí tan solo tienes que estar pendiente de tu propia respiración y de no perderte a «Nemo» si pasa por tu lado. El vacío que produce el mar consigue que sea un gran ejercicio para combatir la ansiedad y la hiperactividad.
BUCEAR AYUDA A CONCEnTRARTE Y A SUPERAR LA ANSIEDAD
El buceo y la naturaleza
Las profundidades del mar son de las pocas cosas que «no hemos echado a perder del todo», entre otras cosas, porque somos incapaces de escrutarlo al completo. Lo máximo que puedes hacer es acercarte hasta donde la presión te permite y contemplar la naturaleza marina en todo su esplendor. El buceo te permite hacer exactamente eso, interactuar con el medio que te rodea y disfrutar de su belleza.
De seguro que cuando ves los documentales en los que los buceadores nadan con delfines o tiburones tienes sentimientos contradictorios, uno de miedo y otro de fascinación. Hay muchas personas que sueñan con poder estar sumergidos entre distintas especies marinas que son, a la par, sorprendentes e impresionantes.
Con cada nueva inmersión te espera una nueva aventura y la posibilidad de acercarte a seres vivos que jamás hubieses imaginado ver en persona.
Amistad
Un argumento típico en las películas de asesinatos marinos es ver cómo el compañero psicópata se carga el tubo del oxígeno del otro para ahogarlo, pero no te sulfures, es ficción. Las inmersiones se hacen, mínimo, entre dos personas que tienen que estar totalmente pendientes la una de la otra durante el proceso dentro del agua. Eso y compartir experiencias es lo que hace que refuerces lazos de amistad.
Te preguntarás cómo hablan sin sonidos, pues bien, en el buceo es muy importante el lenguaje de signos y señales. Comunicarte con tu compañero y con el resto del grupo es vital ante una situación de peligro.
El buceo promueve distintas formas de expresión a las habituales.
Y, por último, ayuda a tu concentración
Como ya dije, la respiración es lo más importante y requiere que estés muy atento tanto a ella como al manómetro de buceo que te indica que el ajuste de oxígeno es el correcto. Te va la vida en ellos, así que más te vale concentrarte…
Estar buceando implica que tu visión no es como cuando estás en tierra y por lo tanto si no quieres perderte todo lo que el mar te ofrece no puedes despistarte. Desde los caballitos de mar hasta las medusas son dignas de admiración.
