La llegada de plataformas de streaming como Netflix, HBO, etc., supuso una vía para los usuarios de poder ver películas, series y documentales de manera legal sin tener que comprarlo físicamente ni tener que piratearlas, siendo Netflix la primera de este servicio que apostó por este modelo y, actualmente, la fragmentación está generando graves problemas para la plataforma: la pérdida de contenido.
Asimismo, todo indica que esta fragmentación no va a hacer más que agravarse, sobre todo con la llegada de Disney+, entre otros ejemplos. Disney, por su parte, lleva años realizando compras de grandes estudios y derechos, haciéndose con todas las películas y series del universo Marvel, además de Star Wars y Los Simpson, por lo que las pocas películas de Marvel que hay en Netflix desaparecerán, así como la de Springfield.
5El gran quebradero de cabeza: Netflix no deja de licenciar contenidos de terceros
La compañía redobla cada vez más sus esfuerzos por tener contenido original, y de su propiedad, en su catálogo, buscando que todos sus abonados puedan encontrar algo que les guste allí. Pero mientras añade nuevos títulos propios, Netflix no deja de licenciar contenido de terceros, algo de lo que también le ayuda a crecer y, sobre todo, a afianzar en sus suscriptores la idea de que todo lo que quieren ver lo tienen en la plataforma.
Esto puede crear un problema, y es que esos títulos de terceros están a favor de que sus propietarios, un día, decidan sacarlos de Netflix y explotarlos por su cuenta. Es la razón por la que la compañía empezó a producir sus propias series, y tal vez uno de los grandes quebraderos de cabeza si los estudios sobre visionados en streaming que han ido apareciendo en Estados Unidos son fiables.