CaixaBank quiere trasladar su estrategia a BPI, su filial portuguesa, con el objetivo de ganar cuota de mercado en el mercado luso sin necesidad de realizar operaciones corporativas con otras entidades.
El banco presidido por Jordi Gual alcanzó el 100% del capital social de BPI a finales del año pasado. Desde enero hasta el 31 de junio, primer semestre con CaixaBank como único accionista, BPI ha aportado a los resultados de la entidad de origen catalán 147 millones de euros.
Esta cifra se divide en dos partidas. Por un lado, el negocio puramente financiero ha sumado 98 millones de euros a las cuentas de CaixaBank, lo que supone un incremento del 29% comparado con los 76 millones de euros que aportó en el mismo periodo de 2018. Por otro lado, los ingresos procedentes de las dos participadas de BPI: Banco de Fomento Angola (BFA) y Banco Comercial e de Investimentos (BCI) de Mozambique.
La filial portuguesa dará a conocer sus cuentas del primer semestre este lunes. No obstante, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, deslizó algunos detalles durante la presentación de los resultados de la entidad matriz el pasado viernes en Valencia. Por ejemplo, ha registrado en los primeros seis meses del año unos crecimientos del 7,5% (interanual) en crédito al consumo, del 1,5% en crédito a empresas y del 5,7% en seguros vida-ahorro. De esta manera, ha alcanzado una cuota de mercado en estos tres ámbitos del 13%, 10% y 15,4% respectivamente.
El consejero delegado de CaixaBank destacó que en Portugal “consolidamos nuestro proyecto y mantenemos dinámicas de crecimiento”. Al igual que en España, “nos gusta el crecimiento orgánico”. “No hay previstos movimientos corporativos” con BPI para crecer en cuota de mercado, insistió.
Además, la estrategia de digitalización en el país vecino está yendo por el camino correcto y sigue contribuyendo de manera positiva a todos los resultados del grupo, apuntaron desde el banco. Un ejemplo, BPI es líder nacional en penetración de clientes digitales con un 43% del total.
En lo que fueron por delante es en el ajuste de la plantilla. Si en España el banco ha cerrado el acuerdo con empleados y sindicatos recientemente (las salidas están previstas para finales de mes o principios de agosto, tal y como confirmó Gortázar), en el país vecino lo firmó en 2017. Se trató de un ejercicio parecido al de CaixaBank finalizado este año, voluntario y con unas condiciones muy beneficiosas, han explicado a MERCA2 fuentes de la entidad.
CAIXABANK MUESTRA EL CAMINO A BPI
La relación de CaixaBank y BPI cumplirá en 2020 sus bodas de plata. Desde que La Caixa entrara como accionista minoritario en el banco portugués allá por 1995 han transcurrido 24 años. El último paso fue la compra del 4% del capital social que aún no estaba en manos de la entidad de origen catalán. Por otro lado, el país está viviendo un fuerte crecimiento económico en los últimos años. Muchas entidades financieras han puesto sus ojos en nuestro vecino.
CaixaBank ha dado en todo este tiempo apoyo en negocios parabancarios como seguros de vida, gestión de fondos o medios pago, han explicado fuentes oficiales. “Ahí CaixaBank es muy grande, muy fuerte, y le ha dado una mayor especialización a BPI”, han ahondado. También le ha aportado una mayor estabilidad en el capital con todo el tema regulatorio.
De cara al futuro, BPI espera poder aplicar en Portugal toda esa estrategia que ha permitido a CaixaBank “convertirse en líder en banca minorista del país”. El Plan Estratégico 2019-2021 muestra que “el foco se centrará en seguir creando valor en BPI, consolidar el modelo comercial y mejorar la rentabilidad”.
La convergencia con el modelo de negocio de CaixaBank junto a la reputación y la satisfacción actual de los clientes serán las palancas sobre las que BPI pivotará para capturar oportunidades en financiación (crédito al consumo, hipotecas, empresas y negocios) y protección (seguros vida y no vida). Esto contribuirá a incrementar sus cuotas de negocio y a mejorar la ratio de eficiencia, apuntó la entidad durante la presentación de su PE 2019-2021. El objetivo es lograr sinergias por valor de 120 millones de euros en estos tres años.
El objetivo de CaixaBank en BPI es lograr sinergias por valor de 120 millones de euros en los tres años que dura el Plan Estratégico vigente
En la actualidad, la filial lusa es el cuarto-quinto banco de Portugal y tiene una cuota del 10-15%. “Tiene mucho camino para crecer”, han apuntado desde la entidad matriz. “Aplicar toda la estrategia comercial y know-how de CaixaBank sobre cómo crecer en banca minorista le ayudará a seguir progresando”, han apostillado.
LA FUNDACIÓN «LA CAIXA», TAMBIÉN PRESENTE EN PORTUGAL
Cuando CaixaBank tomó el control de BPI, la Fundación “La Caixa” también hizo un plan para establecerse en Portugal. El compromiso sellado con el país vecino es tal que el presupuesto de la Fundación allí pasará gradualmente de 12 millones que tuvo en 2018 a 50 millones anuales a partir de 2021. El presupuesto de este año es de 20 millones de euros.
Desde CaixaBank han recordado que BPI ya tenía una parte social de ayuda a los más necesitados. La Fundación “La Caixa” la ha reforzado y trasladado programas propios que realiza en España. A medida que conozcan las ONG y entidades nacionales irán incrementando el apoyo y el presupuesto para obras sociales.