El efecto invernadero y el calentamiento global es un problema a nivel global, pero en España se agrava porque es el país donde más ha crecido en los últimos 30 años. No solo se debe al crecimiento económico, sino a los combustibles y energías utilizados en el país.
Lo que está claro que queremos revertir el calentamiento del planeta y reducir las emisiones contaminantes, es necesario tomar medidas urgentes. España puede ser uno de los países más afectados si vemos aumentado el volumen de los océanos y si se siguen produciendo una desertificación de los bosques. Las sequías y las olas de calor cada vez son más frecuentes y esto se debe a una serie de motivos.
España, donde más crecen las emisiones
Según las mediciones que se han realizado en varios países europeos desde 1997 a 2017, en España crecieron las emisiones de gases de efecto invernadero un 17,9%. Sin embargo, en el resto de países de la Unión Europea, se redujeron un 23,5% las emisiones en estos 27 años.
Unos datos que no se aclaran con el crecimiento económico, puesto que también la Unión Europea elevó su PIB un 58%. Más producción y trabajo no significa más contaminación si llevas un proceso de crecimiento económico sostenible y teniendo en cuenta el medioambiente.
Países a la cola de la UE
España no es el único país en el que crecen las emisiones de gases con efecto invernadero. Austria, Chipre, Irlanda, Malta, Portugal y España son los seis países de la Unión Europea que no han conseguido luchar efectivamente contra estos gases y reducirlos. Sin embargo, el calentamiento global es una de las prioridades de Europa en las últimas tres décadas. Así lo ha manifestado a través de directivas y legislación al respecto.
Chipre y Portugal son los países que más aumentaron sus emisiones en porcentaje, pero su peso en la economía europea no es tan significativo como el de España. Durante el boom económico, hasta 2007, las emisiones en España crecieron de forma salvaje, en más de un 50%.
Motivos del crecimiento de las emisiones
Según el informe europeo que arroja estos datos, las causas de este crecimiento se deben a varios motivos. Las más relevantes en España son el aumento de las emisiones del transporte por carretera, las originadas por la producción de electricidad y calor y las que ocasionan los hogares y servicios.
Hace décadas, las emisiones contaminantes provenían sobre todo de las fábricas. Sin embargo, hoy en día el tipo de relaciones comerciales y la exigencia de un mayor transporte de mercancías es lo que más incide en el crecimiento de las emisiones de efecto invernadero.
Emisiones del transporte en España
En España, donde más incremento se ha producido es en las emisiones procedentes del transporte por carretera. Durante el crecimiento económico se ha aumentado el parque móvil, sobre todo de vehículos diésel. El comercio internacional y las importaciones también han provocado que cada vez se vean más camiones en la carretera.
Por eso es tan importante el establecimiento de medidas que reduzcan la circulación de coches en el centro de las ciudades. Y una sustitución de los coches particulares por coches eléctricos o híbridos. El informe alerta que desde 2013, las emisiones de dióxido de carbono del transporte por carretera aumentaron. Y esto se ha producido tanto en los vehículos comerciales como en los de pasajeros.
Las eléctricas y el carbón
Las compañías eléctricas encuentran más rentable utilizar carbón en lugar de gas para producir electricidad. Es barato y los derechos de emisión que debe pagar tienen un bajísimo precio. En otros países se han emitido leyes contra el cambio climático que ponen un precio disuasorio a las emisiones de carbono.
En España, por términos generales, si bajan la reservas hidráulicas, sube el uso del carbón. Por lo que los años de sequía, con bajas reservas de agua en los embalses, aumentan las emisiones contaminantes. Un círculo que aumenta a su vez el calentamiento global y la sequía.
Energías renovables en España
Además, en los últimos cinco años, en España se ha parado de invertir en renovables y el porcentaje de energía procedente de plantas solares o eólicas es menor. Es necesario seguir el ejemplo de otros países europeos de nuestro entorno que han demostrado ser más eficientes y menos contaminantes creciendo más.
En otros países como Alemania o Reino Unido, en los últimos años se ha producido un aumento en la eficiencia de energía, sobretodo con las energías renovables. También han sustituido parte de la producción de electricidad con carbón por gas natural y han mejorado la gestión de los residuos orgánicos.
Cómo mejorar las emisiones
Los expertos esperan que la situación se revierta en los próximos años y España consiga cumplir los objetivos establecidos por la Unión Europea de cara a 2020. Se espera que los planes presentados por el Gobierno actual supondrán un cambio de tendencia, al apostar por las renovables.
Otros puntos que reducirán las emisiones de efecto invernadero serán el crecimiento de la venta de vehículos eléctricos, la reducción de vehículos diésel y la caída de los costes de las energías limpias. El objetivo de la UE es reducir en un 40% los gases invernadero para el 2030 respecto a 1990, aunque debe ser un esfuerzo repartido entre todos los países miembros.