Alma, la red social social es una nueva manera de hablar de lo social. Con actitud y optimismo. Desde la diversidad. Y a partir de las historias de la Obra Social “la Caixa”. Alma quiere ser también un punto de encuentro de las infinitas realidades sociales de nuestro mundo.
Según Oriol Nolis, “un proyecto con éxito es un proyecto que ayuda a los demás”. El periodista, que presentó los Premios ”la Caixa” a la Innovación Social 2018, nos habla de innovación y de su responsabilidad a la hora de visibilizar en los medios historias que merecen ser contadas.
Tenemos que entender que nuestro trabajo no solo consiste en contar lo noticioso, sino en contar realidades que a menudo están escondidas, que tienen poca visibilidad, pero que merecen ser contadas para que la gente tome conciencia de las situaciones que hay que cambiar para mejorar como colectivo. Dándoles visibilidad contribuimos a luchar contra ellas.
1«Los periodistas tenemos una responsabilidad social como profesionales de la información.»
Conocí los Premios ”la Caixa” a la Innovación Social a través de compañeros de profesión que me habían hablado de ellos y, sobre todo, a través del editor del Telediario Fin de Semana que participó en ellos como jurado. A partir de ahí los conocí más en profundidad y, cuando presenté el acto, pude tener más conocimiento de cuáles eran las tareas de las entidades premiadas.
Con estos premios se consiguen dos cosas: dar visibilidad a proyectos que hasta ahora no han tenido una oportunidad y ayudarles con la financiación para que continúen existiendo, creciendo y fortaleciendo el proyecto.
De los proyectos seleccionados, con el que me siento más identificado es el Programa Valor-Arte, ubicado en Granada, que tiene como objetivo la prevención y detección precoz de la violencia en todas sus formas y otras conductas autodestructivas en adolescentes. Para mí se ha premiado algo muy importante: intentar atajar la violencia en una edad temprana, para evitar problemas futuros. Es una de las grandes virtudes de este proyecto.
Aunque todavía queda mucho trabajo por hacer, una de las cosas más importantes que ha sucedido con el acoso escolar es que desde hace unos años ha empezado a visibilizarse. Ahora lo que deberíamos hacer es dedicarle recursos, no solo materiales sino también profesionales (psicólogos) para que los casos puedan detectarse mejor en las aulas, en el momento en el que ocurren. Lo vital es conseguir que las víctimas entiendan que tienen que contar lo que les ocurre. Muchas veces, como sucede con otros tipos de acoso, se trata de una violencia silenciosa y silenciada.