El fabricante de origen chino Huawei no tiene descanso. La guerra comercial entre Estados Unidos y China le está pasando factura, y no hay día sin sobresaltos. Tras el parón de ventas en su negocio de móviles, ahora también estaría revisando a la baja el segmento de infraestructuras para no perder clientes en España.
En concreto, Huawei estaría haciendo sustanciales rebajas de coste en las negociaciones y renegociaciones para el desarrollo de equipos de red vinculados al despliegue de 5G, así como equipos relacionados con el desarrollo de fibra, donde la compañía china tiene grandes intereses.
Según fuentes del sector conocedoras de la situación, Huawei estaría intentando apostar por lo que ahora mismo tiene más a mano: los precios. Hace una semana, el responsable de la compañía en España, Tony Jin, aseguraba en un evento público que sus equipos de red son los más avanzados tecnológicamente y, además de eso, su nivel de seguridad se encontraba entre los más altos del mercado. Así, fuentes de la compañía asiática aseguran a MERCA2 que no tienen constancia de tal situación y que ellos siguen trabajando igual que siempre.
La cuestión es que el segundo punto antes citado, directamente, entra en conflicto con su actual situación. Básicamente porque las acusaciones que llegan desde Estados Unidos, y las llamadas de alerta hacia la compañía, es precisamente por la relación con el Gobierno chino. De ahí que la afirmación sobre su seguridad sea extraña.
En cuanto al componente tecnológico, es algo difícil de medir. No obstante, desde que saltó la crisis y se empezó a dudar sobre el futuro de Huawei y las infraestructuras, todos los operadores de telefonía han estado preocupados por el factor precio. Y nadie lo ha ocultado. Nokia y Ericsson, en el caso europeo, trabajan con costes operativos más altos y, por lo tanto, eso repercute en el cliente final a la hora de desarrollar los despliegues.
De este modo, todo el mundo ha vuelto la mirada a Huawei y sus precios. Así, de forma involuntaria parece que la jugada ha salido redonda para todos, al menos por ahora. Y es que durante este mes de junio hay previstas reuniones al más alto nivel para exponer, por parte de los distintos Estados miembros de la Unión Europea, sus tesis sobre la compañía china. Así, en caso de que finalmente no haya problemas, al menos en este periodo, puesto que no sería hasta otoño cuando se tome una resolución definitiva sobre un posible veto y sus formas, los operadores de telefonía, y en general los partners de Huawei, se encontrarán precios bastante bajos.
HUAWEI SEGUIRÁ CON TODOS
Sobre la relación con los operadores, Tony Jin confirmó la semana pasada que no ha habido ninguna compañía que haya roto relaciones con ellos. Desde Huawei aseguran que estarán presentes en el encendido progresivo del 5G con los operadores que son clientes; y, del mismo, seguirán siendo el soporte en el desarrollo de fibra. Todo eso unido al negocio de teléfonos móviles, que es otro de los frentes abiertos.
Por ahora, y a la espera de alguna resolución definitiva, Huawei trabajará para todos los operadores
En efecto, ningún operador ha manifestado que vaya a romper relaciones con Huawei. En todo caso, como hizo el CEO de Vodafone España, especificó que en estos momentos y hasta que se aclare todo la intervención de los chinos en el “core” de su red tendría un menor impacto. Eso, al margen del desarrollo y mantenimiento que ahora mismo ya tiene la compañía.
Ahora bien, mantener los clientes no le saldrá gratis a Huawei. Al menos mientras que tenga que exprimir al máximo el factor precios para mantener contentos a sus clientes. Algo que, por otra parte, mete más presión a sus rivales europeos. Y es que si los proveedores de redes se meten en una guerra de precios, y dejan de lado la innovación, será algo perjudicial para toda la industria. ¡Gracias Trump!
LOS DEMÁS NEGOCIOS DE HUAWEI
Al margen de las telecomunicaciones como sector, Huawei ha desarrollado un entramado de negocios basados en la tecnología y la innovación junto a decenas de partners. El problema para los chinos es que dependen, como ha sucedido con los móviles y Google, de que un tercero ponga en duda la seguridad de la compañía.
De ser así, el golpe sería mucho peor. Puede jugar con los márgenes en un segmento de negocio concreto, pero ampliar eso a sus soluciones empresariales sería un peligro y un antecedente perjudicial para la economía.
Entre las principales línea de negocio de Huawei Empresas, por ejemplo, está el soporte de redes para empresas, así como componentes tecnológicos. Es decir, para el uso industrial, la compañía china es capaz de desarrollar a media de las empresas un entramado de redes para su comunicación. Además, esto tiene otra línea de negocio que son las redes privadas inalámbricas para esa misma comunicación interna dentro de las compañías.
Otra de las líneas de negocio que podría verse afectada por las trampas al solitario de Donald Trump es la relacionada con la nube. Huawei desarrolla servicios de “cloud data center” con dispositivos de almacenamiento en la nube y, si algo puede ser tratado demagógicamente en busca de intereses propios son estos servicios. Además, este sector tiene entre los grandes actores del mercado a compañías estadounidenses, y de nuevo todo podría tornar en una derivada de la guerra comercial para perjudicar los intereses chinos.
Pero esto no es todo. Huawei Empresas está desarrollando en España soluciones para banca digital, aplicaciones de eficiencia en el sector energético, internet de las cosas para el desarrollo empresarial, videovigilancia… y son solo algunas muestras. Aunque todas con un mismo denominador común: la seguridad y la confianza en los servicios es fundamental. Por eso, si desde la Administración Trump quieren hacer daño, solo tienen que soltar una nueva liebre para confundir a las empresas.
En este contexto, Huawei no podrá estar eternamente rebajando costes. Sobre todo porque el impacto en su negocio de móviles todavía no se puede medir, pero será importante. Y no es el único, puesto que ya ha salido de algunos segmentos, como el de cables submarinos. Así, parece que no habrá semana tranquila para Huawei.