Las ventas de vehículos eléctricos puros han crecido un 77,73% en España desde enero hasta abril, pero tras estas buenas cifras se esconden algunos detalles que dejan en entredicho el despegue real de estos modelos en nuestro país.
El mercado del vehículo eléctrico o con motores alternativos sigue creciendo en España a un fuerte ritmo. Hasta abril, los concesionarios han matriculado 4.086 vehículos eléctricos (+77,73%), 2.405 híbridos enchufables (+85,29%), 10.642 propulsados a gas (+78,83%) y 30.536 híbridos no enchufables (+33,89%), según los datos elaborados por el Instituto de Estudios de Automoción (Ideauto) a partir de la información facilitada por la DGT. Solo el signo positivo de los porcentajes con respecto al mismo periodo de 2018 debería ser motivo de alegría para un sector creciente dentro de la castigada industria automovilística nacional.
En el ámbito de los turismos, las cifras también son positivas. Han presentado subidas en las matriculaciones hasta abril los coches eléctricos (+106,91%), híbridos enchufables (+84,41%), propulsados a gas (+70,86%) y los híbridos no enchufables (+33,47%).
El director gerente de AEDIVE, Arturo Pérez de Lucia, ha destacado que “estos datos de matriculaciones de vehículos eléctricos en marzo en España coinciden con la tendencia de crecimiento en Europa, donde las matriculaciones superaron las 100.000 unidades, por primera vez, en marzo de 2019, con un crecimiento en la demanda del 31%, principalmente impulsada por los mercados alemanes, noruegos, españoles y holandeses”.
Estas cifras contrastan con la caída de siete meses consecutivos en las ventas de turismos en España. El último dato, un retroceso del 4,47% desde que empezó el año comparado con 2018. Cabe destacar la mala situación de los turismos con motor diésel, puesto que acumulan una bajada del 29,23% en las ventas con respecto al primer cuatrimestre del año pasado.
Por su parte, el director de Comunicación de Ganvam, Alberto Tapia, ha explicado que en el sector confían en que “los nuevos planes de impulso a la movilidad sostenible que se están promoviendo en diferentes comunidades autónomas mantengan el ritmo creciente de esta tecnología, que en las mismas fechas del año pasado no alcanzaba la mitad de las cifras de 2019”.
SOMBRAS DEL MERCADO DEL VEHÍCULO ELÉCTRICO
Al limpiar las grandes cifras del sector aparecen pequeños detalles que no deben descartarse para hacer una foto real del vehículo eléctrico o con motor alternativo en España. Veamos algunos de ellos.
En primer lugar, la venta de vehículos alternativos está viviendo un gran aumento en nuestro país, pero supera por una décima el 10% de la cuota de mercado nacional. Los turismos de gasolina han representado el 61,78% de las matriculaciones de turismos en España el primer cuatrimestre del año. El 28,12% en el caso de los coches con motor diésel. Los eléctricos tan solo suponen el 0,78% del total.
El canal de empresas ha matriculado 2.016 turismos eléctricos puros en España hasta abril, un crecimiento del 89,1%, según datos consensuados entre Aedive y Ganvam. Dado que el total han sido 3.385 unidades, el 60% de los vehículos eléctricos puros han sido comprados por empresas en España estos cuatro meses de 2019.
Además, el canal alquilador acumula 202 unidades matriculadas en lo que va de año, lo que representa un fuerte incremento si lo comparamos con las 31 unidades matriculadas en el mismo periodo de 2018.
Por otro lado, Madrid y Cataluña han acaparado el 75% de la cuota de mercado de matriculaciones electrificadas en España los primeros cuatro meses de 2019, según los datos de Ideauto. Sobre todo, la capital (58,62%). Por tanto, tres de cada cuatro coches eléctricos vendidos en España se quedaron en estas dos comunidades. En el vagón de cola destacan comunidades como Aragón (50 vehículos eléctricos hasta abril), Asturias (58), Cantabria (21), Ceuta y Melilla (9), Extremadura (29), La Rioja (20) o Navarra (56).
Si aparcar en Madrid capital fuera gratis y no existiera Madrid Central con las restricciones de tráfico, ¿habría el mismo número de coches eléctricos? ¿Qué sería de estas cifras sin las flotas eléctricas de los servicios de car sharing? El impulso del vehículo eléctrico no contaminante en emisiones ni en su producción (ojo a este tema) es una necesidad más a añadir a la lista de tareas para cuidar nuestro planeta después de un siglo de castigo indiscriminado. No obstante, la velocidad quizá no sea tan rápida como esperamos o deseamos.
Este ecosistema eléctrico requiere la concienciación y trabajo conjunto de compradores, fabricantes y administraciones públicas. Uno solo no puede tirar del carro. Hacen falta coches eléctricos más baratos (veremos si SEAT consigue modelos por 20.000 euros), subvenciones reales, accesibles y clara a la compra de vehículos e instalación de puntos de recarga en fincas privadas y una red pública y privada de puntos de recarga suficiente para viajar sin pensar que te quedarás tirado en mitad de Albacete o Soria. Hasta entonces, los vehículos de motores alternativos seguirán con una exigua cuota de mercado del 10% en España.