Son los dos representantes de la industria de los seguros en la bolsa española: Catalana Occidente y Mapfre. Catalana Occidente ganó 386,4 millones de euros en 2018 (+8,1 por ciento respecto al año anterior), y Mapfre cerró dicho año con unas ganancias de 529 millones de euros (-24,5%). El buen resultado de la facturación y del resultado técnico impulsaron los números de Catalana Occidente, mientras que la caída de los ingresos (un 5%), más la depreciación de las monedas en los mercados en los que están presentes y una serie de fenómeno meteorológicos, entre otras causas, desinflaron los de Mapfre.
¿Afectaron estas circunstancias a las remuneraciones de los consejeros de Mapfre y Catalana Occidente? Los 16 miembros e instituciones que conforman el consejo de Catalana Occidente recibieron, en total, 4,8 millones de euros. Los 16 de Mapfre (dada la sustitución de Núñez Tovar por Inchausti), percibieron por retribuciones 8,3 millones (es decir, más del doble). Además, si unimos otros conceptos, como los sistemas de ahorro, en Mapfre la cantidad se dispara hasta los 14 millones de euros. En Catalana Occidente no existe tal partida.
La diferencia de remuneración entre el presidente de Mapfre y el de Catalana supera los 1,42 millones de euros
De arriba abajo, Antonio Huertas, presidente de Mapfre, percibió en 2018 una retribución total de 2,13 millones de euros. Un año antes, dicha cifra fue de 2,05 millones de euros. Por tanto, hablamos de un 3,55% más. ¿Y su homónimo José María Serrá Farré? En su caso, la retribución en metálico fue de 712.000, es decir, un 0,8% inferior a la de 2017 (718.000 euros). Extrapolando los datos, todo el consejo de administración de Catalana Occidente gana el doble que Antonio Huertas. O, dicho de otra manera, Huertas gana (él solo) la mitad que todo el consejo de Catalana Occidente.
Antonio Huertas percibió 824.000 euros en concepto de sueldo, 660.000 euros como retribución variable a corto plazo, 576.000 euros como retribución variable a largo plazo, y 71.000 euros por otros conceptos. Además, la aportación al plan de pensiones fue de 527.000 euros. José María Serra Farré, por su parte, consiguió 416.000 euros como parte de su retribución fija, más 22.000 euros de dietas, y 274.000 euros como sueldo. En su caso, y como participante en otras entidades del grupo, también recibió 44.000 euros.
LOS CONSEJEROS DE MAPFRE Y CATALANA
Los datos que ambas compañías enviaron a la CNMV demuestran que entre uno y otro presidente hay una diferencia considerable: en concreto, 1,42 millones de euros. Diferencias que también son apreciables en las remuneraciones que perciben sus consejeros.
En el caso de Mapfre, dos de ellos superan la barrera del millón de euros. Se trata de Antonio Núñez Tovar e Ignacio Baeza, consejero ejecutivo y vicepresidente, respectivamente. El primero alcanzó la cifra de 1,83 millones de euros, y el segundo, 1,11 millones de euros. Núñez Tovar se jubiló en julio, y la empresa le recompensó con una gratificación extraordinaria de 650.000 euros. Además, en su ‘zurrón’ se llevó 4,3 millones por sistemas de ahorro (plan de pensiones). Fue sustituido por José Manuel Inchausti.
En Catalana Occidente, el consejero mejor remunerado fue Hugo Serra Calderón (668.000 euros), seguido por José Ignacio Álvarez Juste (535.000 euros), y Francisco José Arregui Laborda (480.000 euros). A partir de ellos, otros cinco consejeros ganaron 230.000 euros, y otros siete se quedaron en 191.000 euros.
En Mapfre no hay esta situación de homogeneidad. Después de los que ‘cosecharon’ más de un millón de euros, la horquilla en su parte superior alcanza los 702.000 euros de Fernando Mata Verdejo (a la sazón director general del Área Corporativa de Estrategia y Desarrollo y irector corporativo de Riesgos) y los 110.000 euros de María Leticia de Freitas Costa.
Hablando de mujeres, junto a la ya citada, en Mapfre recibieron remuneración Catalina Miñarro Brugarolas (301.000 euros), Ana Isabel Fernández Álvarez (192.000 euros) y María del Pilar Perales Viscasillas (150.000 euros). Por lo que respecta a Catalana Occidente, en su consejo sólo tiene cabida una mujer, María Assumpta Soler Serr, que se embolsó 230.000 euros.