Bayer, Monsanto y el ya famoso herbicida Glifosato (más técnicamente conocido como Roundup) es uno de los grandes culebrones empresariales a nivel mediático, pero en realidad los problemas legales de la alemana van más allá. En concreto, la farmacéutica se enfrentará a lo largo de 2019 (aunque muchos procesos de extenderán a los próximos años) a cerca de 70.000 demandas por los problemas que han generado alguno de sus productos, según reconoce la propia compañía.
Por volumen de demandas, el primer producto que más problemas le dará a la firma alemana será el Essure, un dispositivo médico que ofrece un control de la natalidad permanente con un procedimiento no quirúrgico que ha congregado una demanda de hasta 31.000 afectados, a fecha de 11 de abril. Los demandantes exigen tanto daños compensatorios como punitivos por los siguientes efectos: histerectomía, perforación, dolor, sangrado, aumento de peso, sensibilidad al níquel, depresión y embarazos no deseados. Además, las dos grandes demandas colectivas que se han presentado ya han sido certificadas.
Por su parte, el Xarelto un medicamento oral que se utiliza para tratar y prevenir los coágulos en la sangre que se comercializa en Estados Unidos, será también otro quebradero de cabeza. En concreto, cerca de 25.500 usuarios de este anticoagulante, a fecha del 11 de abril, alegan que han tenido que enfrentarse a distintos efectos secundarios como: sangrado cerebral, sangrado gastrointestinal o de cualquier otro tipo, y «buscan daños compensatorios y punitivos», explica la propia Bayer.
La farmacéutica, junto a la distribuidora de Xarelto (Janssen Pharmaceuticals) se han propuesto hacer frente a todos los demandantes. De hecho, recientemente llegaron a un acuerdo para repartir entre los afectados hasta 775 millones de euros que se repartirá equitativamente entre ambas empresas. Aunque el acuerdo todavía no está cerrado del todo, puesto que se podrían sumar más demandantes o bien las empresas podrían romperlo si no se cumplen algunas de las cláusulas que exigen. A pesar de todo, la compañía no espera que la carga financiera «tenga un impacto adverso en los estados financieros», ya que gran parte del pago lo realizará su aseguradora.
El último litigio colectivo al que se ha enfrentado Bayer, ha sido una demanda colectiva en Estados Unidos en relación con sus vitaminas denominadas One A Day que van dirigidas al apoyo de la salud del corazón, la inmunidad y la salud física. Aunque ésta última en parte ya ha sido resuelta, ya que un juzgado estadounidense señaló que la información sobre la energía que proporciona no es falsa ni engañosa. «En febrero 2019, el jurado emitió un veredicto contra Bayer y encontró que las afirmaciones sobre sus vitaminas no son falsas ni engañosas«, subrayó la compañía. Además, los demandantes no apelaron por lo que el veredicto es definitivo.
MÁS JUICIOS CONTRA BAYER POR EL GLIFOSATO EN ESTE 2019
Cada juicio al que asiste Bayer como demandando por alguno de los afectados por el Roundup es un dolor de cabeza para la compañía. Pese a que este comienzo de 2019 ha sido plácido en este sentido, los próximos meses se presentan más movidos para la farmacéutica como reconocen los analistas. «El buen desempeño de Bayer en el primer trimestre debería brindar un alivio temporal a los accionistas, pero el riesgo de litigios sigue siendo un obstáculo para la cotización«, señalan desde Bloomberg.
En concreto, las últimas adhesiones al caso del herbicida Glisofato ha disparado el número de demandantes un 20% hasta los 13.400 afectados, lo que eleva el riesgo potencial hasta los 6.000 millones de euros, según los cálculos de los analistas. Además, el segundo litigio se cerró a favor del demandante el pasado mes de marzo, y está en marcha el tercer litio en la corte estatal de California que podría tener el mismo desempeño. Asimismo, hay otros cuatro juicios programados en Missouri y Montana para lo que queda del año, aunque todavía no se conocen las fechas.