Iberdrola y Naturgy parten con ventaja frente a sus competidores a medida que buscan desembarcar en América en los próximos años. Se debe gracias a su fuerte posición en el mercado de redes y sus planes de inversiones en Estados Unidos y América Latina. Los analistas esperan que las firmas del sector fortifiquen su posición en los segmentos regulados, mientras que precisamente las zonas con mayor potencial se encuentran en la región americana.
«La principal fuente de crecimiento dentro del sector de las eléctricas provendrá de América Latina y Estados Unidos», señala un informe interno de Bloomberg. En este sentido, los analistas explican que «los principales impulsores son la creciente demanda de energía en Latinoamérica, el envejecimiento de las redes en EEUU y un impulso hacía la descarbonización y la digitalización en el sector».
Las firmas españolas cuentan con importantes ventajas respecto a sus competidores gracias a que «tienen una amplia experiencia a la hora de abordar dichos retos», señalan fuentes del sector. De hecho, Iberdrola ha apostado en los últimos años por incrementar su posición en el mercado regulado, donde el porcentaje de los ingresos que provienen de segmento (según las últimas cifras presentadas) alcanzan un 35% frente a poco más del 20% en 2015.
Naturgy, Iberdrola y EDM aumentarán su inversión en Latinoamerica, mientras que reducen por debajo del 50% lo que esperan gastar Europa en los próximos años
Además, la firma presidida por Ignacio Sánchez Galán está inmersa en los últimos años en un importante desarrollo en su estrategia de digitalización para su negocio de redes. Así, Iberdrola ha invertido hasta 5.400 millones de euros para fortificar su división de monitorización de los flujos eléctricos con los que trabaja en su segmento de redes. Además, espera incrementar ese gasto en otros 4.800 millones hasta el 2022, lo que le da (según los analistas) una importante ventaja respecto a sus competidores, de cara a próximos grandes contratos tanto en Estados Unidos como en América Latina.
Por su parte, Naturgy destaca dentro del sector gracias a la fuerte inversión que espera desarrollar en los próximos años en Latinoamérica. En concreto, dentro de su nuevo Plan Estratégico 2018-22 prevé que hasta un 39% del futuro capex, dinero que tiene presupuestada las firmas para inversiones, se destina a dicha región. A la española le sigue Enel, con un 31% (centradas especialmente en Brasil) y ya por detrás, a una distancia importante, estaría Iberdrola (aunque con una fuerte presencia en Estados Unidos) y EDM.
El fuerte despliegue que pretende desarrollar en América Latina la firma presidida por Francisco Reynés es una de las grandes bazas para la revalorización futura de la compañía que prevén los analistas. De hecho, desde JP Morgan señalan que Naturgy “ofrece una exposición atractiva dentro de las empresas ligadas a las actividades reguladas, que además goza de importantes fortalezas para generar flujos de efectivo”, un potencial que proviene «especialmente” del “negocio de gas en latinoamerica». Por el contrario, la firma de inversión advierte de riesgos para la gasística española “en sus negocios vinculados a materias primas”, que incluyen el suministro global de gas o el suministro de energía en España.
EUROPA Y ASIA PIERDEN ATRACTIVO PARA EL SECTOR
Las nuevas prioridades de las firmas europeas por el mercado regulado de latinoamerica y EEUU refleja que se esperan años complicados en otras regiones. De hecho, los analistas de Bloomberg señalan que «es probable que las empresas limiten su presencia en Europa oriental y Asia en medio de riesgos políticos y regulatorios».
De esta manera, el sector europeo ha comenzado un lento viraje para no depender tanto de los ingresos que le llegan desde Europa. Los primeros en dar ese paso han sido las firmas eléctricas ibéricas (Naturgy, Iberdrola y EDM), ya que el aumento de las inversiones en América se compensa con menores en Europa. De hecho, el porcentaje de capex que esperan gastar en el viejo continente en los próximos años está por debajo del 50%: la firma presidida por Reynes la ha reducido hasta el 48%, mientras que en el caso de la bilbaína será del 44%. Por su parte, EDM será la que menos dinero destine a la región con un 35%.
El reajuste de las firmas ibéricas de cara a su negocio en Europa se está siguiendo también por parte del resto de las compañías del sector, aunque de una manera mucho menos ambiciosa: Enel tiene entre sus planes su marcha atrás en Rusia, mientras que CEZ y Engie lo están haciendo de Turquía. Además, los analistas señalan que EDF, EON, RWE, Starkraft y la propia Enel «han cedido activos en los mercados emergentes europeos debido a que el crecimiento de la demanda ha sido menor del esperado y también por los obstáculos políticos, regulatorios y monetarios». Aunque dentro del sector quedan algunas excepciones como la de Fortum en Rusia y Snam en Grecia.
Por su parte, el mercado asiático seguirá siendo un entorno residual para el conjunto del sector en los siguientes años, según explican fuentes del sector. Entre los problemas que detectan los analistas de cara a un posible crecimiento en Asia estarían que pese a que las barreras de entrada son pequeñas en mercados como China, Indonesia o Vietnam, supone un desafío competir por activos con grandes desarrolladores regionales. Además, en la retina de muchas firmas quedan los estrepitosos fracasos de muchas de ellas, entre los que destacan los problemas de Orsted en Taiwán, Fortum en la India o los problemas de Engie para desprenderse de su participación en Glow.