BBVA ya no esconde públicamente el daño «reputacional» causado por las informaciones publicadas sobraE las escuchas de Villarejo encargadas por Francisco González aunque no termina de coger el toro por los cuernos para dar por concluido una de las páginas más negras de su historia.
El banco presidido por Carlos Torres ha reconocido que “el grupo podría estar inmerso en investigaciones por las autoridades judiciales (…) en relación con la contratación de actividades presuntamente irregulares que, de confirmarse, podrían tener un impacto reputacional negativo”, según ha reflejado el banco en el informe de Gobierno Corporativo remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Por traducir al lenguaje común, “contratación de actividades presuntamente irregulares” significa masivo espionaje realizado por el excomisario Villarejo a empresarios, políticos, periodistas y hasta el rey emérito durante 2004 y 2005 para evitar el asalto de Sacyr al poder de la entidad, todo ello encargado por el expresidente de BBVA, Francisco González, según la información publicada desde enero por MONCLOA.COM.
En cuanto al tiempo condicional sobre su inmersión en investigaciones de las autoridades, se puede poner nombre y apellidos. En concreto, la pieza secreta número 9 de ‘Operación Tándem’ que abrió el magistrado del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, en enero a raíz de las publicaciones conjuntas de MONCLOA.COM y El Confidencial. La entidad presidida por Carlos Torres ha aclarado que “hasta el momento” no ha recibido “ninguna notificación formal al efecto”.
El banco ha informado que “está llevando a cabo una investigación interna, no siendo posible predecir en este momento el ámbito o duración de dichas investigaciones ni su posible resultado o implicaciones para el grupo”. Además, ha comunicado que realiza una gestión y seguimiento constante de dichos procedimientos para la defensa de sus intereses, dotando (en razón del número de litigios de los pronunciamientos judiciales y el estado del procedimiento) las correspondientes provisiones para su cobertura, cuyo valor no especifica.
El máximo responsable del banco confirmó en una carta enviada a los trabajadores del banco el 14 de enero que “desde junio de 2018 iniciamos una investigación sobre la contratación y servicios prestados por el Grupo Cenyt (propiedad de Villarejo) a BBVA, que está en curso”. La firma PwC trabaja desde entonces para que realizar un informe forensic sobre esas relaciones. Del mismo modo, informó que el bufete Uría Menéndez se sumaba a la investigación realizada por el bufete Garrigues.
Sin embargo, ha añadido el banco en el informe remitido a la CNMV, el resultado de las referidas acciones y procedimientos, tanto en los que el banco ya es parte, como aquellos que puedan surgir en el futuro o en los pronunciamientos en los que sean parte otras entidades bancarias, es difícil de predecir. Por tanto, en el caso de modificación de criterios jurisprudenciales o resultados inesperados de algunos de estos litigios, puede que las provisiones dotadas resulten insuficientes.
RETRIBUCIONES DE BBVA EN 2018
Por otro lado, Francisco González dio por finalizada su dilatada trayectoria en BBVA el 31 de diciembre de 2018 con un último salario debajo del brazo que ascendió a 5,13 millones de euros. Su salario fijo se mantuvo alrededor de los 2,5 millones, pero la remuneración variable se estableció en torno a los 2,6 millones de euros (un 20% menos), según se desprende del Informe anual de remuneraciones de los consejeros remitido a la CNMV. Esta cifra representa un 11% mejor que en 2017. Un día antes de la publicación de este informe, FG tomaba un café cortado en la terraza de una cafetería en la Plaza de la Lealtad.
Su sustituto como presidente, Carlos Torres, cobró menos que su predecesor que ya ocupa el cargo de consejero delegado del banco. En 2018 recibió 4,51 millones de euros, repartidos en un fijo constante de 1,96 millones de euros y 2,4 millones de euros en variable (un 8% menos). Eso sí, su plan de pensiones creció hasta los 18,6 millones de euros durante el año pasado.
BBVA ha explicado en el informe que a pesar de los «excelentes» resultados del grupo en 2018 la remuneración variable de los consejeros ejecutivos generada ha caído dado que algunos indicadores financieros, aunque mejoran respecto al ejercicio anterior, se sitúan «por debajo del objetivo establecido», fundamentalmente debido a los desequilibrios económicos en Turquía y Argentina.
JUNTA DE BBVA SIN CERRAR EL CASO VILLAREJO
En un tercer hecho relevante remitido a la CNMV, BBVA ha anunciado la convocatoria de la Junta General Ordinaria de Accionistas, que se celebrará en Bilbao, en el Palacio Euskalduna, previsiblemente el próximo 15 de marzo de 2019 en segunda convocatoria, de conformidad con lo establecido en la Ley de Sociedades de Capital.
En el orden del día previsto no hay mención alguna al “Caso Villarejo” ni a la investigación interna abierta por el banco. En los seis puntos se encuentran: cuentas anuales, nombramiento de miembros del Consejo de Administración, aprobación de la Política de Remuneraciones de los consejeros, aprobación de un nivel máximo de remuneración variable de hasta el 200% del componente fijo, delegación de facultades en el Consejo de Administración, y la votación consultiva del Informe Anual sobre Remuneraciones de los consejeros de BBVA.
Una ocasión perdida para aclarar y finiquitar ante sus accionistas, los dueños reales del banco, un asunto turbio de una época pasada. Aunque mantener a Francisco González como presidente de honor de la entidad y de su fundación tampoco es la mejor manera de pasar página.
SORPRENDENTE SUBIDA DE BBVA EN BOLSA
Desde el 9 de enero que saltó la bomba informativa de MONCLOA.COM sobre las escuchas ilegales encargadas por Francisco González a Villarejo, las acciones de BBVA son las únicas que registran una subida entre los bancos españoles cotizados en el Ibex 35. En concreto, los títulos de BBVA acumulan un ascenso del 4,3% a cierre del 12 de febrero.
El analista colaborador de ActivTrades, Eduardo Bolinches, ha afirmado que «llama tremendamente la atención que BBVA y SAN (hasta hace poco) eran los únicos que no habían cedido más del 50% de las ganancias desde el 27 de diciembre». «Sin embargo», ha añadido, «ver si hay algo más allá de hacerse con autocartera está difícil puesto que ahora casi todas las operaciones son ciegas». La entidad vasca adquirió entre el 9 y el 11 de enero 5,02 millones de acciones propias, equivalentes al 0,08% del capital. Unas operaciones con un valor de mercado de 25 millones de euros para elevar un 10% su autocartera.