El Grupo Unicaja Banco ha anunciado que presentará a la Junta de Administración la distribución de un dividendo del 40% del beneficio neto de 2018 (153 millones de euros), es decir, 3,8 céntimos por acción que representan un total 61 millones de euros.
Este beneficio supone una mejora del 10,2% con respecto a 2017. Está fundamentado, según ha remitido el banco en una nota a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), “en el aumento del margen de intereses del 3,1%, la disminución de los gastos de explotación del 2,2%, así como una importante y recurrente reducción de las necesidades de saneamientos”.
Uno de los mayores esfuerzos de la entidad ha sido la reducción de los activos no productivos – NPAs- (dudosos más adjudicados inmobiliarios), que cayeron en 995 millones de euros (21,7%) en los últimos doce meses, con disminuciones netas de 785 millones de euros en los activos dudosos (-29,0%) y de 210 millones de euros en los adjudicados (-11,2%). Así, el saldo de activos dudosos del Grupo a cierre del ejercicio 2018 disminuyó hasta 1.926 millones de euros y el de inmuebles adjudicados hasta 1.661 millones. La caída de dudosos se traduce en una bajada de la tasa de morosidad de 2,0 puntos porcentuales en el año, hasta situarse en el 6,7%.
En términos de solvencia, a finales de diciembre de 2018, el Grupo Unicaja Banco presentaba una ratio de capital ordinario de primer nivel (CET 1) del 15,4%, y de capital total del 15,7 %, que suponen un incremento interanual de 0,9 p.p. y 0,6 p.p., respectivamente.
En términos de fully loaded (según el cómputo una vez finalizado el período transitorio para la aplicación de la normativa de solvencia), Unicaja Banco cuenta con una ratio CET1 del 13,5% y de capital total del 13,7%. Esto representa un incremento interanual de 0,7 p.p. en la ratio CET1 y de 0,4 p.p, en la de capital total.
El margen de intereses subió un 3,1% respecto a diciembre de 2017 hasta 601 millones de euros, debido “al impulso de la nueva producción crediticia, que contribuye a estabilizar los ingresos, a la aportación de la cartera de renta fija, y a la disminución de los costes de financiación”. El agregado del margen de intereses y las comisiones se elevó a 820 millones de euros (+2,1%). En estos términos, las comisiones aumentaron un 2,4% en el período referido. Además, Unicaja redujo los gastos de explotación un 2,2%.
El volumen de recursos administrados por el Grupo (sin ajustes por valoración) alcanzó los 55.507 millones de euros, “en un año difícil para la gestión de los recursos dada la negativa evolución de los mercados financieros y sus efectos sobre la valoración de los patrimonios bajo gestión”.
La entidad ha resaltado que la dinámica comercial ha permitido, por un lado, seguir incrementando los volúmenes de operaciones crediticias en los segmentos de particulares (23%) y pymes (18%), y, por otro, continuar con el aumento de los recursos captados, en especial a través de seguros de ahorro y cuentas a la vista.
UNICAJA, MÁS DIGITAL
En el marco del plan de digitalización en curso, Unicaja ha registrado un incremento continuado del número de clientes digitales en 2018, que ya representan cerca de un 30% del total. Actualmente, del conjunto de las transacciones financieras y consultas de la clientela, el 67% tiene lugar a través de los canales de banca electrónica, el 22% se realiza en oficinas y el 11% en cajeros automáticos.
En el último ejercicio, el banco ha proseguido el proceso de digitalización con la potenciación de las funcionalidades de los canales on line, que se desarrollan con tecnologías avanzadas, como, entre otras, la puesta en marcha del servicio de pago móvil o como el acceso a los servicios de la aplicación móvil de Unicaja Banco mediante la identificación biométrica, además del incremento de productos específicos para los canales digitales. Unicaja Banco también ha ampliado en 2018 las funcionalidades ofrecidas a través de la solución de pago por móvil Bizum para permitir al cliente realizar pagos de forma directa a ONG.