Ocurrió a finales del pasado año. Nordex conseguía un contrato con Vattenfall para instalar 350 MW en Holanda. No es el único. “Una serie de subastas en mercados de crecimiento clave como México, Argentina y Chile impulsarán la cartera de pedidos desde finales de 2018 hasta 2020”, apuntan desde Bloomberg Intelligence (BI). Todo un respiro para Acciona que, en 2016, fusionó Acciona Windpower con la enseña danesa con sede en Alemania.
Dos años de dura travesía del desierto en los que la promoción de instalaciones de energía renovables en tierra en Alemania se ha paralizado, cayendo cerca de un 20%. Las perspectivas de la compañía es intentar recuperar ese terreno perdido hasta 2020. Mientras tanto, en mercados como México se esperan crecimientos superiores al 200%.
México, Argentina, Chile e India pueden ser los motores para el despegue de Nordex tras el parón en Alemania
Latinoamérica no es el único ‘punto de mira’ que compensará la menor actividad prevista a corto plazo en Alemania. En la India, Nordex trata de conseguir una mayor cuota de mercado arrebatándosela a Suzlon y Siemens Gamesa. En 2015, antes de la fusión con Acciona Windpower, Alemania representaba alrededor del 37% del total de pedidos de Nordex, el más grande de todos los mercados, según BI. Europa representaba el 80% de sus ventas mientras que Acciona Winpower centraba su cartera de pedidos en Latinoamérica: 94%.
ACCIONA Y LA ACCIÓN DE NORDEX
Desde que Acciona se ‘casara’ con Nordex, la acción de esta última se ha visto seriamente afectada. En 2016, en el momento de la fusión, los títulos de la alemana cotizaban en el DAX a 26 euros. El pasado de noviembre cayó hasta los 7,33 euros (una caída del 71,8%), muy cerca del mínimo histórico de 7,03 euros cosechado en marzo de 2018. Desde entonces, ha vivido su particular montaña rusa en la que llegó a subir hasta los 9 euros.
Durante los nueve primeros meses de 2018, Nordex obtuvo unas ventas por 1.773 millones de euros (2.320 millones en el mismo periodo del año anterior), un ebitda del 4% (7,8% un año antes), y pedidos por 3.1 GW (superiores a los 1.1 GW de los nueve primeros meses de 2017). En el tercer trimestre de 2018, los pedidos fueron de 1.0 GW, por encima de los 0.2 del mismo periodo de 2017. Resultados que, según la compañía, están en línea con las expectativas definidas a principios de año.
El hecho de que el Gobierno alemán acordará un volumen de 4 GW para el periodo 2019-2021 impulsará sus resultados. Subastas en Francia, Suecia, Finlandia, España, o Ucrania también pueden empujar unos números que en los nueve primeros meses de 2018 fueron rojos: su beneficio neto cayó en 51,8 millones de euros. El ebitda fue de 71,4 millones de euros, un 110,5% inferior al del mismo periodo del año anterior (181,9 millones de euros). Nuevos contratos que todavía no se reflejan en unas cuentas que entraron en pérdidas en el primer trimestre de 2018.
De cara a final de año, la compañía a los mandos de José Luis Blanco se manifiesta optimista, previendo que su facturación se situará entre los 2.400 y los 2.600 millones de euros, y un margen de ebitda entre el 4% y el 5%, frente al 7,8% cosechado hace un año. De cara a 2019, sus ojos están puestos en la primera subasta que se celebrará en Colombia. “Se prevé que todos los mercados expandirán la actividad de instalación en los próximos tres años”, indican desde Bloomberg Intelligence.
En 2016 Nordex adquiriró el 100% del capital de Acciona Windpower en una transacción que se valoró en 785 millones de euros pagados en efectivo y acciones a la par que Acciona se convertía en accionista elevando su participación en la enseña alemana hasta el 29,9%. Dos años en los que no han faltado recortes de plantilla en Nordex, profit warnings, y explicaciones por parte de Acciona a la CNMV por la forma en que ha valorado su participación en Nordex.