Carrefour se suma a la tendencia de todos los supermercados de cuidar el medio ambiente. Todos conocemos el caso de la retirada de bolsas de plástico, apelando a que son difíciles de destruir y que por lo tanto contaminan mucho. Para reducir su uso ya en muchos sitios nos cobran la bolsa, si es que la pedimos.
Los ciudadanos están al día y la mayoría ya llevan sus carros de la compra o la típica bolsa de rafia plastificada. Pero, ¿qué pasa cuando esas supuestas ganas de cuidar el planeta no son más que campañas publicitarias para recaudar más? Debemos informarnos y estar vigilantes que eso no pase. Adelante el falso ecologismo de Carrefour.
7Bolsas de rafia, la amiga de Carrefour no tan buena
No obstante en las bolsas de rafia, que también recomendaba Carrefour, tenemos una gran aliada para la sustitución de las bolsas de plástico. Pero, hay un pequeño problema que veremos si se resuelve. La procedencia de este tipo de bolsas, que es Asía. Dónde el coste de producirlas es mucho más barata. Por el bajo sueldo y las condiciones más precarias de los trabajadores que las producen. Llegando incluso a utilizar a niños para su producción. ¿Queremos fomentar la explotación de personas para ser más ecologistas?
¿Y por qué se hacen en Asía? Claramente por motivos económicos. Si las bolsas de rafia se produjeran en Europa, seria prácticamente inviable su producción. No saldrían a cuenta o saldrían muy caras. Flaco favor al medio ambiente también, ya que el principal componente de estas bolsas, es el polipropileno, que no se puede reciclar. Veremos si las cabezas pensantes solucionan esto del falso ecologismo. Y sobre todo, a ver si las grandes empresas como Carrefour no vuelven a lanzar campañas confusas, donde lo verde es una apariencia sólo superficial. Que además perjudica en vez de ayudar a restablecer el equilibro. Dramáticamente violado por la gran poca conciencia que esgrime el ser humano en su afán por lucrarse egoístamente.