Sigue la fiesta de BBVA: así se palman 1.200 millones en Turquía

El valor del 49,85 % del banco turco Garanti que tiene BBVA ha bajado en Bolsa 1.220 millones de euros (6.930 millones de liras) desde que comenzó al año, es decir, un retroceso del 32,23 % en su cotización.

Las acciones de la entidad otomana han pasado de cerrar el 29 de diciembre de 2017 en 10,27 liras hasta las 6,96 liras que finalizó la sesión el martes 11 de julio. Al multiplicar cada precio por el número de acciones que tiene BBVA de Garanti (que no han variado este año) y restar ambas, el resultado que se obtiene son los 1.220 millones de euros apuntados.

En lo que va de década, la entidad presidida por Francisco González ha invertido 6.908 millones de euros en tres operaciones para hacerse con la mitad de Garanti y convertirse en su máximo accionista. La última en 2017, cuando desembolsó 859 millones de euros para comprar otro 10 % del banco turco y alcanzar el mencionado 49,85 %. La participación de BBVA en Garanti está valorada por los analistas de Bloomberg en aproximadamente 3.600 millones de dólares (algo más de 3.084 millones de euros), es decir, casi un 45 % menos de la inversión total realizada.

Los títulos del banco presidido por Francisco González tampoco han corrido mejor suerte en el Ibex 35. En línea con el resto de las entidades financieras españolas cotizadas, la acción de BBVA registra un retroceso del 12,97 % en lo que llevamos de año y mantiene a duras penas el nivel de los 6 euros. Según Sergio Ávila, Market Analyst de IG, “un 12,3% de los beneficios del banco proceden de Turquía, esto el mercado lo sabe y la debilidad de la lira turca le penaliza claramente”.

Cotizaciones de BBVA y Garanti

De hecho, el analista advierte del “complicado” aspecto técnico de los títulos de BBVA. “Los 5,94 euros es un nivel clave; si lo perdiera a precios de dicho cierre podría ser buen momento para salir ya que eso ampliaría las probabilidades de mayores caídas con objetivo 5,37 euros”, argumenta. Además, “el precio cotiza por debajo de las medias móviles de 50 y 200 periodos”.

GARANTI, EL POLVORÍN TURCO DE BBVA

Durante estos años, Garanti ha generado pingües beneficios en las cuentas de la española hasta el hecho de ir incrementando el peso de la entidad turca en la estrategia mundial de BBVA. Sin embargo, la escena política a la que está dirigiendo Erdongan a Turquía tambalea la confianza de los inversores, quienes huyen de cualquier incertidumbre salvo para hacer sangre con apuestas bajistas.

La victoria de Erdogan por mayoría absoluta en las elecciones presidenciales celebradas el 24 de junio han dado más poder al veterano político turco. Menos de un mes después, ha nombrado a su yerno jefe económico del Gobierno y ha emitido un decreto que le permite nombrar al jefe del banco central del país. “Erdogan señaló anteriormente que se opone a las tasas de interés más altas y si ahora puede controlar las decisiones del banco central, las esperanzas de un aumento de tipos se evaporan”, ha declarado a Bloomberg Nuria Álvarez, analista de Renta 4.

Para Nerieda González, analista de mercados de AFI, la principal incertidumbre recae sobre “la independencia del banco central y el poder que Erdogan y el nuevo ministro de economía podrían llegar a ejercer sobre la institución”. “Para evitar la salida de capitales que está llevando a la depreciación de la TRY frente al USD, el banco central tendría que subir los tipos de interés de referencia (a lo que Erdogan se muestra en contra) en su próxima reunión para reforzar la confianza sobre la institución y su compromiso con el control de la inflación (15 % en junio frente al 5% objetivo)”, ha ahondado.

Los principales focos de riesgo en Turquía, según la analista de AFI, son: la elevada inflación y la fuerte depreciación de la lira turca frente al dólar. Por un lado, “la reciente subida de tipos de interés que intenta frenar el avance de la inflación puede empezar a penalizar el buen desempeño económico del país”, ha declarado. Por otro lado, “la depreciación de la TRY frente al USD lleva a un encarecimiento de la deuda externa sustancial, con potencial impacto en las empresas no financieras”, ha añadido.

La versión oficial de BBVA califica la subida de la inflación como una «sorpresa» debido al «efecto del mal tiempo en el precio de los alimentos». «Esperamos que se corrija en julio y se sitúe cerca del 13,5% a finales de año«, ha precisado. En cuanto a la debilidad de la moneda turca, desde la entidad española indican que en la próxima reunión del banco central (24 de julio) el mercado apunta a una nueva subida de entre 50 y 100 puntos básicos para contrarrestar las presiones en los precios. «La lira turca ha comenzado a estabilizarse, tras las fuertes subidas de tipos de interés (+500 puntos básicos en lo que va de año)», han puntualizado fuentes internas.

Más allá de su participación en Garanti, BBVA es uno de los mayores acreedores del país euroasiático. En el último Business Intelligence de Bloomberg sobre este tema, los analistas han hecho especial hincapié en que la deteriorada calidad de los activos de Turquía, la inflación y el riesgo de una creciente intervención estatal en la política monetaria pintan un panorama bastante sombrío para los bancos del país y los prestamistas extranjeros expuestos a la economía.

Los bancos en España (principalmente a través de una unidad de BBVA), Francia (BNP Paribas) e Italia (UniCredit) representan casi dos tercios de los 224.000 millones de dólares (algo más de 190.000 millones de euros) que los bancos internacionales prestaron a Turquía en el último trimestre de 2017, según datos del Bank for International Settlements (BIS). La exposición de más de 130.000 millones de dólares (más de 110.000 millones de euros) al sector privado no bancario es una preocupación clave para los analistas de Bloomberg, dado que la actual debilidad de la lira impactará en las ganancias y provisiones.