Richard Weiss, Manus Cranny y Anna Edwards para Bloomberg
Incluso Adidas puede tropezar de vez en cuando a medida que gana terreno sobre el líder del mercado de artículos deportivos Nike.
El crecimiento de las ventas de la compañía alemana se desaceleró más rápido de lo que los analistas esperaban en el tercer trimestre, lo que provocó que las acciones cayeran a su mayor nivel en 12 semanas.
Las ventas de equipos de baloncesto y fútbol cayeron después de que los contratos de patrocinio finalizaron y la compañía intensificó los planes para recortar su red de tiendas en Rusia después que las ventas cayeron.
“Algunos participantes del mercado podrían estar preocupados por el impulso más lento de la línea de alta”, dijo el analista de Warburg Research, Joerg Philipp Frey en una nota. Las acciones se negociaron a 3,8% menos en Fráncfort, la mayor caída intradiaria desde agosto.
Si bien los ingresos generales aún avanzaron 8,7%, esa cifra fue menos de la mitad del ritmo del segundo trimestre. La ganancia operativa aumentó en más de un tercio a 795 millones de euros, superando las expectativas de los analistas, ya que la compañía vendió productos más caros. Los ingresos en Norteamérica crecieron en casi una quinta parte a 1.100 millones de euros, un récord histórico, mientras que el crecimiento se desaceleró en Europa occidental, que sigue siendo el mercado más grande de la compañía.
“Hasta ahora hemos crecido cada trimestre de este año 30% o más en los Estados Unidos, y no hemos visto ninguna desaceleración”, dijo el presidente ejecutivo Kasper Rorsted en una entrevista con Bloomberg TV. “Continuamos viendo una demanda muy fuerte para nuestros productos, y seguimos esperando un buen cuarto trimestre. Está claro que estamos ganando participación en Norteamérica”.
Las ventas de los productos de la marca Adidas subieron 10%, las de Reebok disminuyeron
La industria de artículos deportivos en 2017 ha sido una historia de divergencia. Under Armour registró su primer descenso de ventas desde que se lanzó a la Bolsa el mes pasado, mientras que Puma, como Adidas, se beneficia de una tendencia hacia más ropa deportiva fuera de los gimnasios, cuestión que llevó a aumentar su pronóstico de ganancias tres veces este año. Amazon también se mueve hacia esta tendencia, preparando el escenario para una mayor agitación en los Estados Unidos, donde la marca Reebok de Adidas lucha por obtener ganancias.
Lo suficientemente grande
En general, el mercado también es “lo suficientemente grande como para que Amazon se mude”, explicó Rorsted en la entrevista. “Creemos que eso no va a cambiar el mercado fundamentalmente, pero estamos viendo a los consumidores en línea”.
Los ingresos generados por el comercio electrónico avanzaron en más de un tercio en el trimestre. Si bien las ventas de los productos de la marca Adidas subieron 10%, las de Reebok disminuyeron, y Rorsted observó que podría pasar hasta el próximo año para que la marca vuelva a crecer.
“Es probable que la tasa de crecimiento de ingresos y ganancias se modere después de dos años y medio de ciclo”, escribió en una nota Piral Dadhania, analista de RBC Europe. “Creemos que la calidad del margen y el beneficio debería ser bien recibida por el mercado”.
Japón y Rusia fueron las únicas regiones donde los ingresos de la compañía cayeron en el trimestre. Rorsted redobló sus esfuerzos por detener esa tendencia al cerrar unas 200 tiendas en Rusia, por encima de un objetivo anterior de 150. Dijo que no espera que los fundamentos en Rusia mejoren antes de que suban el precio del petróleo y se levantan las sanciones. Por el contrario, la compañía planea sumar alrededor de 2.000 tiendas en China para 2020.