Se acaba el verano y empiezan las dietas. Esto es así ahora y ha sido así siempre. Seas hombre o mujer, cuando llega el día 21 de septiembre empiezas a pensar que quizá ya es hora de parar y que sería bueno dejar las tapitas del bar para ocasiones más especiales, como los fines de semana, ¿No es cierto?
Ahora bien, existen muchos tipos de dietas. Que si la dieta Dunkan, que si la dieta de batidos, que si evitar el desayuno…, muchísimas, lo que hace que la tarea de escoger una siempre sea más complicada. Hoy vamos a explicar una nueva dieta, la dieta Keto, una dieta que me ha resultado muy curiosa.
La dieta Keto, bienvenidas sean las grasas
Para empezar, hay que aclarar que la dieta Keto es una dieta cetogénicas, ¿Qué quiere decir esto? Pues que es una dieta que restringe el uso de los hidratos de carbono para así poder obligar al cuerpo a quemar las reservas de grasa. Eso sí, el consumo de grasas se vuelve primordial en esta dieta.
Cómo se sigue la dieta Keto
Es muy fácil de seguir ya que se tienen que sustituir los carbohidratos por alimentos que sean ricos en grasas, pero en grasas saludables, de esas que podemos consumir de forma habitual. Alimentos como el aguacate, las nueces, el pescado, la carne, los quesos, los huevos o los aceites son básicos en este tipo de alimentación.
Un café con leche y una tortilla con salmón ahumado es un buen ejemplo de desayuno Keto.
La cosa quedaría de la siguiente forma: se debería consumir entre un 60% y un 70% de grasas saludables, un 20% o 30% de proteínas y un 10% de carbohidratos. Eso sí, no creáis que todo está permitido. Las patatas fritas, los bollos y demás están totalmente prohibidos, como en cualquier otra dieta.
Alimentos que no se pueden consumir en la dieta Keto
Muchas personas se preguntan que qué pasa con las verduras. ¿Están prohibidas en este tipo de alimentación? La respuesta es no, pero también es cierto que no se puede consumir todo tipo de alimentos que provengan de la tierra. Por ejemplo, en la dieta Keto están totalmente prohibidas las frutas tropicales, como, por ejemplo, la piña o el kiwi, pero sí que se pueden tomar frutos del bosque.
En cuanto a las verduras, barra libre. Todo lo que sea verde o similar es bienvenido en en Keto.
¿Funciona de verdad?
Para ser sincera, no puedo asegurar a ciencia cierta que este método funcione de verdad, ya que no la he seguido en ningún momento. Pero voy a explicar su funcionamiento para que vosotros decidáis si queréis o no queréis probarla.
Ingerir menos de 50 gramos de carbohidratos al día, y muchas grasas saludables, hace que se pueda perder peso de forma sencilla. Hay que tener en cuenta que el organismo suele usar la glucosa como combustible, que es la sustancia que resulta de la metabolización de los carbohidratos. Esto quiere decir que si no se consumen los carbohidratos suficientes, el cuerpo usará esas reservas que tiene, es decir, la grasa acumulada.
Esta es la forma de funcionamiento de la dieta Keto. En teoría debería funcionar así que, ¿Te apuntas a probarla para quitar esos kilitos de más del chiringuito de la playa?