Cómo olvidar aquellas noches en las que toda la familia se reunía delante de la televisión para ver sus concursos favoritos. Abuelos, padres e hijos lloraban de risa con las pruebas a las que eran sometidos y, en muchas ocasiones, envidiaban los premios que muchos concursantes ganaban.
Era una cita que nadie se perdía. Son concursos que desaparecieron con el paso de los años y que muchos, incluida una servidora, echamos de menos. He aquí esos concursos que nos hicieron llorar de risa y que echamos de menos.
10Su media naranja
Tres parejas de concursantes (matrimonios) competían entre sí para demostrar quién más conocía a su cónyuge. Se les formulaba preguntas y por cada respuesta que conociese el otro se les premiaba con 50.000 pesetas. En la tercera pregunta el premio subía hasta las 100.000.
Risas, peleas y momentos únicos que quedarán grabados en la mente. El matrimonio ganador era aquel que alcanzara más dinero, independientemente de los aciertos. Esta podría seguir recaudando dinero porque regresaba al día siguiente.