Grifols probablemente sea una de las empresas menos conocidas del Ibex 35 pero que lleva un crecimiento imparable. La compañía está dedicada al sector farmacéutico y hospitalario, siendo una de las grandes empresas a nivel mundial del sector de hemoderivados, surte suministros a hospitales y se centra en el sector de la medicina transfusional. Es decir, la actividad de la empresa gira sobre la investigación, fabricación y comercialización de productos derivados del plasma sanguíneo, sueros, nutrición clínica, sistemas de diagnóstico y material sanitario.
Un negocio que parece muy rentable visto los buenos resultados presentados por la compañía. Solo en el primer trimestre de este año ha logrado unos ingresos de 1.061,7 millones de euros (+10,7% respecto al primer trimestre de 2016) y su beneficio neto ha alcanzado los 134 millones de euros, lo que supone un incremento del 7%. Por divisiones; se aprecia como la demanda de proteínas plasmáticas ha impulsado el crecimiento de ventas de la división Bioscience en un 15,1%, hasta los 853,6 millones mientras que la división Diagnostic ha crecido un 6% potenciada por la evolución del negocio de diagnóstico transfusional por tecnología NAT.
Una buena evolución de la división Diagnostic que podría continuar en los próximos trimestres debido a que la compañía está potenciando esta área. Hay que destacar que en enero de este año ha comprado la unidad de diagnóstico transfusional por tecnología NAT de Hologic por un importe de 1.850 millones de dólares por lo que en próximos trimestres comenzará a impulsar los resultados de esta área.
Aun así, el gran negocio de la compañía son las proteínas plasmáticas que han supuesto el 80% de los ingresos totales. Un negocio en el que Grifols es la compañía líder a nivel mundial en centros de obtención de plasma, con cerca de 180 instalaciones en Estados Unidos y cuya prioridad estratégica es la de garantizar el acceso a plasma para hacer frente a la creciente demanda del mercado de proteínas plasmáticas, por lo que en los primeros meses del año han continuado las inversiones destinadas a la apertura de nuevos centros.
El 80% de los ingresos totales provienen de su negocio de plasma
Los expertos de Renta 4 han señalado acerca de los resultados que “los ingresos se han situado por encima de nuestras estimaciones, avanzando un 11% en el primer trimestre frente a nuestra estimación de un crecimiento del 8% y presumiblemente veremos un año de más a menos debido a la base comparativa. Observamos una excelente evolución del crecimiento orgánico en Biociencia (+15% frente al 9,5% estimado por Renta 4), apoyado en buena parte por la positiva evolución de los volúmenes de las ventas de Albumina y Alfa-1, si bien también se aprecia cierto impacto positivo por precios en los principales mercados”.
La compañía obtiene la mayor parte de sus ingresos fuera de las fronteras del Viejo Continente. En concreto, en EEUU y Canadá logra unos ingresos de 728,5 millones de euros (68,6% del total) mientras que en la Unión Europea factura 161,7 millones (15,3%) y en el resto del mundo obtiene 171,3 millones (16,1%). Una gran presencia en Estados Unidos debido a una gran operación corporativa que la compañía llevó a cabo en junio de 2010. Año en el que el grupo español compró la estadounidense Talecris Bioteherapeutics Holding por una cantidad en torno a los 2.800 millones de euros. Una operación que permitió a la compañía catalana consolidarse como el tercer mayor fabricante de hemoderivados del mundo, cuando anteriormente ocupaba la quinta posición. Además, posteriormente ha llevado a cabo otras compras en el país como la adquisición del 35% del capital de Aradigm Corporation, el 45% de Alkahest o la participación del 49% de Interstate Blood Bank.
Una historia ligada a un apellido
La compañía, con sede en Sant Cugat del Vallés (Barcelona), cuenta con una amplia historia ya que fue fundada en 1940 cuando el doctor José Antonio Grifols y sus dos hijos fundaron los Laboratorios Grifols en plena posguerra civil española. Un nacimiento de una empresa que en sus primeros años de vida se centraba en el laboratorio de análisis y en la práctica de transfusiones sanguíneas. Tres años después José Antonio y Victor Grifols se incorporarían al laboratorio e investigarían el descubrimiento de la liofilización que aplicaron al plasma humano para la obtención del plasma liofilizado, introduciendo Grifols la patente del procedimiento en España. Además, en 1945 abrieron el primer banco de sangre privado en España (Hemobanco) y siete años después (1952) registrarían su primera solución glucosalina.
Bastantes años después, en 1987, se produce su reestructuración empresarial y se convierte en un holding de empresas y sería en 1988 cuando crearía una de sus primeras filiales fuera de España al crear una empresa en Portugal. Una internacionalización que se aceleraría en la década de los 90 cuando se crearon filiales en Miami, Chile, Argentina, México y distintos países de Europa.
En 1988 comienza su expansión internacional
Un éxito de una compañía que siempre ha ido unido a un apellido: Grifols. En la actualidad, la empresa está presidida por Víctor Grifols Roura, que es presidente no ejecutivo y consejero dominical desde el 1 de enero de 2017. Aun así, cuenta con una dilatada trayectoria en la empresa puesto que desde 1985 ha ejercido como consejero delegado y máximo ejecutivo del grupo sucediendo en dichas tareas a su padre, Víctor Grifols Lucas y encabezó la reorganización de 1987 que dio lugar a la estructura actual del Grupo.
Una familia que también tiene presencia en el cargo de consejero delegado solidario puesto que lo ostentan Raimon Grifols Roura (hermano de Víctor Grifols Roura) y Víctor Grifols Deu (hijo de Víctor Grifols Roura) desde el 1 de enero de 2017 sucediendo en el cargo al actual presidente del grupo y ambos cuentan con cargos en los órganos de administración de diversas sociedades del grupo.
Un nombre, el de Víctor Grifols Roura, que es muy conocido a nivel nacional puesto que cuenta con una gran fortuna de 2.500 millones de euros (la décima de España) y ha mostrado, de una manera clara, su apoyo a la independencia de Cataluña. Además, también salto a la actualidad ya que se llevó gran parte de la actividad económica de la compañía a Irlanda, con el objetivo de pagar menos impuestos. Un país desde el que gestiona la tesorería global, el área de I+D y su negocio más rentable: Los hemoderivados.
Disparada en bolsa
Una buena gestión de una compañía que ha alcanzado cifras récord no sólo en sus resultados sino también en bolsa ya que se encuentra cotizando en zona de máximos históricos gracias a un avance del 30% durante este año (cuarto valor del Ibex 35 que más sube). Una subida que ha incrementado notablemente el valor de la compañía y que en la actualidad cuenta con una capitalización de mercado de 15.500 millones de euros.
Una buena evolución de la compañía que ya ha despertado gran interés para algún país. En unas filtraciones de Wikileaks el Departamento de Estados Unidos señalaba a Grifols como un activo estratégico para el país debido a la inmunoglobulina de uso intravenoso, un producto derivado del tratamiento del plasma con aplicaciones terapéuticas.
Un documento que redactaba el país estadounidense seleccionado infraestructuras civiles y recursos naturales del mundo que consideraba estratégicamente relevantes y que contaba con unos 300 activos, como pudiera ser el estrecho de Gibraltar o el gaseoducto que une España con Argelia.
Estados Unidos considera Grifols como un activo estratégico
Un buen comportamiento que podría continuar puesto que goza del beneplácito de las casas de análisis. Desde la firma JP Morgan, a raíz de los resultados presentados, han elevado su precio objetivo hasta los 27 euros (frente a los 25 euros anteriores) y siguen recomendando sobreponderar. La mejora se debe a unas cuentas “muy sólidas” y “la previsión es que la división de Biosciences, que ha mostrado una subida de los ingresos del 11,9%, aumente sus ingresos por encima del 10% durante todo el ejercicio 2017”. Además, “hemos elevado nuestra estimación para el beneficio por acción (BPA) en el periodo 2018 – 2021 en un 3%”, por lo que es probable que continúe la buena tendencia observada en resultados durante los próximos trimestres.
Un buen comportamiento en bolsa que será bien recibido por los numerosos accionistas presentes en Grifols. Uno de ellos es Deria SA, que posee un 8,911% y que forma parte de los hermanos Grifols Roura (Víctor, Nuria, Raimon, Albert y Enric). Un paquete de acciones que estaría valorado en casi 1.400 millones de euros. Por su parte, la viuda de Víctor Grifols y Lucas (hijo del fundador y padre del actual presidente), Nuria Roura Carreras, posee un 6,154% del capital.
Aun así, se aprecia como todos los demás accionistas significativos son inversores extranjeros. La firma Scranton Enterprises posee un 8,67% del capital mientras que Thorthol Holdings tiene en su posesión un 7,06% del total de acciones. Además, en el accionariado también están presentes gestoras de fondos de gran calado como Fidelity o BlacRock, entre otras.