Es todo un clásico: la chica guapa encuentra su príncipe azul en un señor con las cuentas bancarias bastante bien saneadas y al final, fueron felices y comieron caviar iraní. Lo de encontrar el amor en una cartera petada ha ocurrido siempre. No solo en nuestro país sino fuera de nuestras fronteras, a pesar de que ellas manejen su propio dinero, ojo. Salma Hayek encontró el amor en François-Henri Pinault, el presidente del conglomerado empresarial Kering, es decir, que si compras en Gucci o en FNAC, un porcentaje de tu dinero va a la cuenta bancaria común de la mexicana y su marido. O Mariah Carey, quien a pesar de tener un net worth de 535 millones de dólares, sufrió el latigazo del amor y el despecho después de que su prometido, el multimillonario -sí, aún más que ella- James Packer la dejase compuesta y sin diamantes.
9AMAIA SALAMANCA
La figura de Amaia Salamanca llegó al gran público de nuestro país a través de la serie ‘Sin tetas no hay paraíso’. Ella interpretaba el papel de Cata, una joven de recursos limitados que se enamoraba profundamente de Rafael Duque -‘El Duque’- el personaje que perseguirá durante toda la vida al guapísimo actor Miguel Ángel Silvestre.
Tras aquella exitosa serie, en 2010, Amaia conoció a Rosauro Varo, un importantísimo -y riquísimo- empresario sevillano con el que empezó y del que jamás se separó. Se apartó del foco mediático y en apenas 3 años ha tenido 3 hijos. Ahora luchan por salvar su negocio empresarial en el mundo de la hostelería, el restaurante Otto, que según fuentes cercanas a la pareja está condenado a la quiebra.